La bendita rodilla del goleador Paredes

El delantero anotó el gol del triunfo de Colo Colo sobre O'Higgins en el epílogo, después de ir 0-2 abajo. El "pichichi" se reencontró de "chiripazo" con las redes en el momento en que su equipo más lo necesitaba y ahora quedó a cuatro tantos de igualar el récord del "Chamaco" Valdés.

La tarde gris del Monumental se convirtió en una caldera gracias a la rodilla biónica de su goleador estrella, Esteban Paredes. El artillero no había anotado por el Campeonato Nacional, pero ayer se descartuchó frente a las redes en el momento preciso, cuando su equipo más lo sufría y los 22 mil hinchas palpitaban la remontada.

Y es que las dos estocadas de O'Higgins en el primer tiempo calaron fuerte en las huestes de Mario Salas. Juan Fuentes (11') y Maximiliano Salas (27'), dejaron a la visita arriba frente a un Cacique que nunca halló el rumbo en la primera etapa. Es más, "Ribery" Muñoz tuvo el tercero, pero no se atrevió a chutear al arco. Y al final le pasó la cuenta.

Es que el complemento fue un pleito aparte. Marco Antonio Figueroa retrasó a los de Rancagua y apeló al contragolpe, y eso lo aprovechó el "Comandante" para tirar toda la carne a la parrilla y empezar a cimentar la remontada, lo que se concretó a los 49', cuando Gabriel Suazo (quien se había perdido una cantada antes) descontó con un zurdazo.

Pero la joyita de la tarde llegaría 18 minutos después en los pies de Gabriel Costa. Tal cual, pues el uruguayo nacionalizado peruano ejecutó con su derecha un tiro de esquina, metiendo una comba mortal para Miguel Pinto. El ex portero de Universidad de Chile alcanzó a tocarla antes, pero la redonda cruzó la línea de gol para el empate transitorio.

Con el ánimo por las nubes, Colo Colo adelantó aún más sus líneas para encontrar el gol del triunfo, pero esas instancias están destinadas a los hombres importantes, que hacen historia. Esteban Paredes, que venía de una laaarga sequía (marcó por última vez el 28 de octubre del año pasado a Audax Italiano), se guardó ese estreno con la red en el instante que su equipo más lo pedía.

A los 89', y ante el aliento de su gente, Iván Morales arrancó solo frente al portero y su remate dio en el travesaño, pero en el rebote, como si el destino estuviera de su lado, el "7" acompañó la jugada y su rodilla derecha se encontró con la pelota para mandarla a guardar.

Entonces el desahogo fue memorable, pues el delantero corrió, gritó y se subió a los letreros de publicidad para decir "acá estoy yo, y más vigente que nunca". Y cómo no, si el tanque albo llegó a los 211 goles por torneos nacionales y quedó a cuatro de igualar el récord de "Chamaco".

"Sufrimos harto, nos marcaron goles muy rápidos, no le encontrábamos la vuelta al partido. Luchamos y conseguimos una victoria merecida", explicó el goleador del Popular, quien añadió sobre la "cuenta regresiva" que "el equipo es más importante que el récord, no le doy relevancia".

Así, el ex peliteñido abordó una camioneta blanca en compañía de su familia y se fue de la Ruca, mientras su Lamborghini quedó tapadito y enrejado en la zona de estacionamientos.

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La joyita de Paredes permanece en la Ruca con custodia. Él se fue junto a su familia en una camioneta.[/caption]

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