Los albos lograron un amargo 1-1 en su visita a Huachipato, tras perderse varias ocasiones. bUn cabezazo de Claudio Valenzuela en el minuto 95 dejó en el suelo al equipo blanco. b La única buena noticia es que Paredes quedó a tres del récord.
"La intensidad no es todo en el fútbol", contaba Jorge Valdivia hace algunos días. Una máxima que toma más sentido después de la visita de ayer a Huachipato. El 1-1 tuvo a los albos como protagonistas. Y nada más. La buena noticia es que el gol de Paredes le permite caminar con tranquilidad hacia la marca de ser el más anotador de la historia.
La velocidad con la que los albos salieron por la victoria fue sobresaliente. Como ha sido la costumbre en la era de Mario Salas, el equipo santiaguino se adueñó de las acciones, ante los gritos y arengas del técnico.
Pero la impericia de sus hombres en punta pasó la cuenta ante un rival que sólo se limitó a defender su arco.
Terminó en farra
El reloj y la victoria de la UC fueron los principales enemigos de Colo Colo. A medida que el minutero avanzaba, el equipo sumaba rapidez en el traslado de la pelota, pero evidenciaba un claro nerviosismo a la hora de meterla adentro.
Los 20 minutos finales fue un verdadero desperdicio. A los 70', el larguero le dijo que no a Jorge Valdivia. Dos minutos más tarde, entre Iván Morales y el mismo Paredes perdieron una clara opción de desnivelar el marcador.
Pero el delantero linarense entró más que enchufado a la cancha del estadio CAP. A los 74', avisó con un remate que fue despejado por el meta Yerko Urra.
Otra vez a sufrir, en la jugada siguiente Valdivia condujo la pelota hasta el área chica, pero falló justo en el momento de anotar al arco. Los albos lamentaban dos puntos perdidos, pero una falta de José Bizama sobre Morales terminó en polémico penal.
Con el récord en la cabeza, Paredes tuvo la frialdad suficiente para anotar la única cifra del partido desde los doce pasos y llegó a 212 tantos en su registro histórico como jugador de primera.
En la última jugada, en el quinto minuto de descuento, la zaga de Salas se durmió y un cabezazo de Claudio Valenzuela fue el duro castigo para un equipo blanco desesperado y sin ideas.
Empate amargo, donde la única buena noticia fue el tanto de Paredes, quien quedó a tres de las 215 conquistas de Francisco "Chamaco" Valdés.
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