La imagen demuestra una violación a los protocolos, por lo que el club se expone a una multa en lucas.
Cuando lograron que les dieran la pasá para que el fútbol regresara, todos los clubes aceptaron que por nada del mundo se podían violar los estrictos protocolos sanitarios.
Por eso, justamente, explotó la última polémica, que empañó el triunfo del Bulla sobre Iquique en el norte. Es que una simple foto, donde se ve a Camilo Moya remojándose en un jacuzzi junto a Pablo Aránguiz, este último más encima con la mascarilla abajo, activó las alarmas entre los desinfectados juristas de la Anfp.
De acuerdo a las bases renovadas del torneo, la imagen significaría una multa económica para el Bulla, no así la pérdida de puntos. Y, por lo mismo, Gonzalo Espinoza llamó a dejar el tema ahí.
"Sabemos que no se debía, pero hemos seguido los protocolos al pie de la letra. Todo lo que nos ha dicho el cuerpo médico lo hemos hecho a más no poder, incluso hemos exagerado", dijo el "Bulldog", que admitió que el par de perlas se llevó su pencazo interno.
"Esto es un error para la gente de afuera, ya se conversó el tema, no hay que darle tanta vuelta y tratar de dejarla pasar. Por una foto no creo que se eche a perder todo", insistió el autor del empate ante el Colo, que prefirió ver el vaso medio lleno en la hoguera.
"Hoy (ayer) nos hicimos el octavo PCR y nadie en el club ha salido ni siquiera con dudas", resaltó la disciplina monacal del plantel, que incluso viajó en charter a Iquique para evitar los contagios.
Temas Relacionados
