Junto con analizar la decisión de sus ex compañeros de la "U" que hoy defienden a Colo Colo, el portero se refirió al estallido social. "Mis amigos más cercanos me dicen que soy chaleco amarillo", reveló.
Tras su bullada salida de Universidad de Chile, Johnny Herrera retornó a Everton con la ilusión de reencontrarse con su mejor fútbol y volver, junto al cuadro viñamarino, a un torneo internacional.
Durante los últimos días, el portero hizo noticia luego de ser acusado de protagonizar un accidente vehicular en la Ciudad Jardín. "Según la constancia de Carabineros, la señora se saltó un pare. Y ya lo denuncié", aclaró el ex capitán de la "U", que -en entrevista con La Tercera- dijo estar feliz con su nueva vida en la Región de Valparaíso.
Entre otro puntos, admitió que recibió diversas ofertas para continuar su carrera deportiva.
Consultado sobre si se hubiera ido a jugar a Colo Colo o la UC, Johnny dijo que "no, cero posibilidad. Era como morderme la lengua por todos los años que estuve en mi club. Estuve toda mi vida en la U. Sería como irme con el enemigo, traicionar a tu patria. Jamás lo haría".
Por lo mismo, se mostró sorprendido por la decisión de Miguel Pinto, que llegó al Cacique pese a su pasado como capitán azul. "Me llamó la atención. Miguel era nacido y criado en la U, capitán, tuvo buenos años. Fue raro. Tendrá sus motivos. No los comparto, pero él sabrá por qué se fue. Es respetable, pero yo no lo haría", aclaró.
Sobre el caso de Leo Valencia, aseguró que "uno no sabe por qué toman esas decisiones. El fútbol antes que cualquier cosa yo lo tomo con pasión. Si bien es un trabajo, en mi caso, siendo tan identificado con la U, jamás me iría a jugar a Colo Colo o la UC. Ellos sí; es su problema".
Johnny Herrera y la contingencia
En relación al estallido social, Johnny Herrera reveló que -hasta ahora- nunca marchó.
"Comparto todos los reclamos y demandas sociales de la gente. De pronto es fácil criticar y no empatizar cuando estás en tu casa con aire acondicionado o comodidades. Uno conoce la realidad y sabe que hay gente que la tiene difícil. Yo no soy criado en cuna de oro. Mi mamá se sacó la cresta para darme educación. Sé lo duro que es, empatizo con todas las demandas sociales. Ojalá que exista un Chile mejor. Se ha ido avanzando, ha habido buenas ideas y ya es hora que las lleven a cabo", reflexionó el arquero.
"Mis amigos más cercanos me dicen que soy chaleco amarillo, pero yo solo alabo a la gente que hace bien la pega. Me han llamado de partidos políticos para participar y jamás lo haría", cerró.
