El talentoso volante dejó de ser un incondicional del jefe cuando quedó fuera del once copero. Distancia que le dolió al adiestrador, más aún cuando hoy ya se le busca un reemplazante.
La nube negra que se instaló en Macul está lejos, pero lejos de disiparse. Es que las cuatro derrotas al hilo no sólo reflotaron viejas rencillas directivas, también hicieron que las diferencias que existen en el camarín se hicieran públicas.
Así fue como ayer La Cuarta se enteró del alejamiento que existe entre Jaime Valdés y Héctor Tapia, quienes habían empezado el semestre como yuntas y hoy ya casi no se hablan en Macul.
La historia se inició cuando "Pajarito" quiso dar un paso al costado antes que se iniciara la segunda rueda, pues sentía que ya no estaba para la alta competencia. Fue entonces cuando "Tito" lo convenció que se quedara para que -juntos- pusieran el nombre del Cacique en lo más alto de América.
Sin embargo, Valdés fue perdiendo protagonismo en las oncenas del adiestrador y el portazo definitivo lo recibió cuando el DT cambió el esquema y la formación para el duelo ante Corinthians. Allí, el nacido en Palestino no apareció entre los "bendecidos" y esto enfrió lo que hasta ese entonces era casi una amistad.
Más tarde, Jaime tampoco tuvo presencia estelar en el choque con Palmeiras y durante la semana que pasó se encargó de comunicarle a sus cercanos que se quiere ir de Macul, pues ya no se siente considerado.
Algo que en el cuerpo técnico del estratega consideran "reversible", ya que creen que todos los hombres que deben hacer banca se molestan tarde o temprano. Eso sí, les molestó que los descargos del volante se hicieran justo ahora cuando están pasando por un cuestionamiento que consideran "innecesario", ya que "la evaluación de nuestro trabajo se debe hacer en diciembre y no ahora. Menos dar nombres", datearon desde el "Campeonodromo".
Mosa vs. Ruiz-Tagle
El otro foco de conflicto que se abrió en estas horas es la nueva pelea de los pesos pesados del club.
Es que Aníbal Mosa no le gustó que Gabriel Ruiz-Tagle le cobrara los pasajes a Sao Paulo en la anterior fase de la Libertadores.
"Es una vergüenza que se les cobre a los directores los vuelos charter, pues en vez de unir a la institución, la está fragmentando", soltó el ex jerarca de la concesionaria.
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