Rolando Ortega prepara los productos para cocinar y les hace clases a los aspirantes del programa. b El profesional también se encarga de supervisar que los concursantes estudien.
Detrás de todo "Discípulo del Chef" hay un cuarto cocinero. Así como leyó, porque aparte del italiano Ennio Carota, el francés Yann Yvin y el español Sergi Arola, los líderes de los equipos que compiten en el programa de CHV, asoma Rolando Ortega.
Este profesional de las preparaciones en 2014 fue nombrado chef revelación y en 2016 recibió el galardón a mejor cucharón de Chile. Y no sólo eso, porque es dueño de los restaurantes "La Salvación" y "Salvador cocina y café".
La Cuarta quiso conocer a este genio del cuchillo, quien está a cargo de la producción gastronómica del espacio y que además de supervisar a los participantes, también les hace clases de nivelación. "Estoy en la parte creativa del diseño de las pruebas, somos tres quienes estamos ahí, pero yo aporto en la parte gastronómica de las pruebas. Cada vez que grabamos debo hacer el pedido de comida, mantener abastecido el mercado y además dirijo las clases de cocina que le hacemos a los participantes".
- ¿Cómo es eso?
A diferencia de programas como MasterChef, donde participaban cocineros amateurs, en este espacio se mezcla gente que sí estudió gastronomía y que trabajó en restoranes. Incluso, hay un par que se desempeñó en Europa y otros que se dedican a otras cosas. Las clases apuntaban, en una primera fase, a nivelarlos un poco, ayudar al grupo de los amateurs para que se acercaran lo más posible, en cuanto a técnica, a los que sí tenían estudios profesionales.
- ¿Sólo eso?
No. Ahora que avanzó el programa, me junto con los chef de cada equipo y me dicen qué contenidos les gustaría o ven necesario que se refuercen, cómo hacer una buena salsa, cómo emulsionar, técnicas y cosas así, hacemos estas reuniones una o dos veces a la semana. Todos tienen diferentes niveles y distintas fortalezas.
- ¿Qué cosas enseñas?
Cada uno se da cuenta de las mejores armas que tiene y a medida que avanzan las pruebas, les dan tareas hacia ese lado. Me dicen "deseo que refuerces a tales personas, porque el otro día les pedí que me emulsionaran una salsa y no supieron hacerlo". Tomo eso y en la clase trabajamos con quienes sea necesario alguna técnica o un contenido determinado.
- ¿Le cuentas a los chef cómo se portan los discípulos en clases?
Ellos preguntan, el feedback, la comunicación que tengo con ellos es fluida porque en el fondo en las clases soy sus ojos, doy un informe, nada tan formal o les cuento si es que alguien no asistió a clases y el motivo también, soy como el contralor del programa, jajá.
Temas Relacionados
