Una cosa es ser ladrón y otra bien diferente ser un maldito que abusa de niños pensó un amigo de lo ajeno en España que se habría puesto en riesgo al denunciar a una pedófilo que cachó cuando entró a chorear a su casa.
Estamos hablando de un entrenador de fútbol-sala que fue detenido en el país ibérico tras la denuncia de un anónimo que podría ser el autor del robo acontecido nueve días antes en la casa del profesor.
El ladrón justiciero llamó a la policía petazeta y les soltó que había dejado unas cintas de vídeo con contenido pedófilo bajo un coche con la dirección de su supuesto propietario.
Cuando los guardianes de la ley llegaron al lugar encontraron las cintas con el mensaje: "he tenido la desgracia de que han caído las cintas en mis manos y me veo en la obligación de presentarlas dejando que ustedes hagan su trabajo y puedan meter a ese... en la cárcel de por vida".
Tras mirar las cintas que "recogían agresiones sexuales a niños de unos 10 años", los investigadores pudieron identificar a su autor, al que detuvieron, precisó la policía en un comunicado.
Por ahora, los agentes han podido identificar "a cuatro menores víctimas de abusos y agresiones, entre ellos un chico de 16 años que podría llevar desde los diez sufriendo estas prácticas".
Este entrenador de fútbol-sala "se ganaba la confianza de los niños en las instalaciones deportivas en las que trabajaba y les convencía para ver juntos películas de contenido pornográfico. Posteriormente, incitaba a los pequeños a masturbarse y finalmente abusaba sexualmente de ellos", explicó la policía.
AFP
