Esta vez no eran 33, sino 26 los mineros que quedaron atrapados desde el jueves pasado en la mina de carbón Severnaya, en la ciudad de Vorkuta (Rusia), pero sin correr la misma suerte que tuvieron nuestros compatriotas en 2010.
El accidente ocurrió luego de que una fuga repentina de gas metano dejara la mansaca en la mina, pues provocó dos explosiones a una profundidad de 780 metros, y éstas generaron un derrumbe y un incendio. A raíz de esto, pese a que hubo 81 sobrevivientes, los 26 mineros quedaron atrapados, mientras otros cuatro murieron.
El gobierno ruso cachó el atado e implementó un operativo de rescate para salvar a los afectados, el cual empezó en la madrugada de ayer, pero las cosas no salieron como esperaban.
Resulta que mientras los rescatistas se encontraban en la mina, se produjo un tercer estallido, donde cinco de ellos murieron, y a estos se sumó otro minero más, haciendo que la operación fracasara.
Finalmente, los 26 trabajadores no lograron sobrevivir, dejando un total de 36 muertos.
El ministro de Situaciones de Emergencia de Rusia, Vladimir Puchkov, sapeó que eran pocas las posibilidades de que los afectados pudieran sobrevivir, pues el lugar donde éstos quedaron atrapados tenía muy poco oxígeno, además del calor que había allí.
Por su litro, la República de Komi, región rusa donde se ubica la mina, declaró tres días de duelo por los fallecidos.
