“Me quiero guardar para mí las cosas que sentí porque tuve muchas sensaciones feas, malas, inclusive, algunas hasta buenas”.
El asesinato de Kim Gómez dio paso a los testimonios más impactantes del último tiempo.
La muerte de la niña de 7 años remece a Argentina debido a la bestialidad con la actuaron los dos delincuentes (de 17 y 14 años) que arrastraron por 15 cuadras a la pequeña tras robar el vehículo de su madre.
Además del relato entregado por el padre del mayor de los antisociales, quien pidió las penas del infierno para su propio hijo, surgieron las declaraciones de los principales afectados: los padres de Kim.
“Me destrozaron”
Ante los medios trasandinos, Marcos, padre de Kim, aseguró que “somos gente buena y laburante. Nos destrozaron, nos hicieron mierda. La tengo a mi vieja muriéndose y a la mamá de la nena también”.
“Yo sé que soy fuerte, pero en este momento me siento mal. Se me parte el alma, se me llevaron mi ángel, mi nenita. ¿Cómo se pueden meter con una criatura? No les importa nada”, lamentó.
Además, dio a conocer que “me llamó el papá de uno de los chicos (asesino), estuve llorando toda la noche, mirando fotos, recuerdos. Me llamó, me quiso pedir disculpas, le quiero dar la oportunidad que me venga a pedir disculpas y me mire a los ojos. Quiero que vayas al cementerio a despedir a mi hija. ¿Sabés que le gusta? Le gustan los capibaras. Llévale un capibara”.
“No puedo olvidar”
Por su parte, Florencia, mamá de Kim, reconoció estar destrozada y pidió que los delincuentes que asesinaron a la menor paguen una condena justa. Aunque nada pareciera acercársele.
“Que se haga justicia, Kim no fue la primera pero quiero que sea la última. Me la destrozaron a mi bebé. No me puedo olvidar las imágenes”, dijo entre lágrimas junto a Marcos Gómez, el papá de la niña y su expareja.
Entre lágrimas, la mujer pidió que “no nos dejen solos, queremos que nos ayuden en todo lo que puedan”.
Además, relató que tuvo la posibilidad de estar cara a cara con uno de los asesinos de su hija (el de 17 años). Al respecto, Marcos confirmó que “lo pude ver a la cara. Me quiero guardar para mí las cosas que sentí porque tuve muchas sensaciones feas, malas, inclusive, algunas hasta buenas. Es raro, es difícil. No le deseo a nadie pasar por esto. Le pude decir algunas cosas al chico y la verdad que me siento bien”.
“Vamos a hacer justicia, estoy seguro, pero no me voy a quedar ahí solo. Los chicos estos se van a tener que hacer responsables”, sentenció.