Lo cambiaron por el chocolate

No sé qué le pasa a mi señora. No hacemos el amor hace tres meses y lo único que tiene en su mente es comer chocolate. Nada más, doctor.

Doctor Cariño:

No sé qué le pasa a mi señora. No hacemos el amor hace tres meses y lo único que tiene en su mente es comer chocolate. Nada más, doctor.

Se acuesta y se levanta con un chocolate en la boca. Y yo sólo la miro, la deseo y la amo, mientras ella mastica y mastica el cacao con la boca sucia como el Chavo del 8. Anoche me enojé y le tiré el chocolate a la calle y me dijo que la dejara sola y se puso a llorar.

Ahora estoy durmiendo en la pieza de alojados. S.O.S.

René

René:

Sería muy enfermo de la cabeza que la regaloneara con chocolates para que se le pasaran los monos. Así que le voy a decir lo siguiente: si no le dan la pasada y su señora prefiere comerse un chocolate en vez de a su marido es porque con esto del confinamiento hay mucho estrés.

Ella está nerviosa, aburrida del encierro y en el chocolate vio una vía de escape. Más encima usted actuó como un energúmeno tirándole la golosina a la calle en vez de conversarle y tratar de comprenderla. A las mujeres se les conquista todos los días y en ese sentido es que debe hacer la pega.

Pruebe con algún jueguito, con recuerdos de jóvenes.

Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com

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