Quinceañera enamorada de un caradura que conoció en una fiesta

Doctor:

Le escribo desde Los Ángeles, tengo 15 años y estoy sufriendo. Conocí a un chico que me tiene de cabeza, no puedo olvidarlo. En el liceo hicimos una fiesta para juntar dinero para una familia que está pasando apuros, yo estaba en la puerta cobrando la entrada, cuando él llegó con su grupo de amigos.

Lo vi y se me iluminó la cara, fue un flechazo, amor a primera vista. Dejé la caja y me fui a la fiesta. Él estaba ahí, le juró que me estaba esperando. Me agarró de la mano y nos fuimos a bailar. Me sentía en las nubes.

Nos arrancamos de la fiesta, nos fuimos a su auto, comenzamos a beber y a besarnos. Usted ya sabe el resto de la historia, me entregué. Luego me fue a dejar a mi casa, me dio un beso y esperó hasta que entrara.

Pero, nunca más me habló, es como si yo no existiera. No sé qué hacer. ¿Le pregunto lo que le pasa? ¿Sigo esperando que me hable?

Por favor, dígame que está confundido, que todo va a volver a ser como esa noche mágica.

Ángeles

Mi querida Angelita:

Pucha que me salió enamorada y frágil. Usted se leyó todos los cuentos de princesas y pensaba que este caradura era su príncipe azul.

Pero no mi niña, la vida, la real, es siempre más difícil. Pero no se sienta tonta, usted no es la única que ha pasado por esta experiencia, los frescos que andan detrás de niñas inocentes, abundan.

No quiero hacerla sufrir más, pero no le puedo decir que él está confundido, simplemente jugó con usted.

Así que a lavarse esa carita, secarse las lágrimas y olvidarlo. Ni se dará cuenta cuando aparezca un amor en su vida, alguien que merezca ese corazoncito que busca a su príncipe.  

Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com

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