"Ha pasado un mes desde una tremenda fiesta a la que fui con mis tres amigos, donde pasó de todo...".
Doctor Cariño:
Ha pasado un mes desde una tremenda fiesta a la que fui con mis tres amigos, donde pasó de todo. Había comistrajo, copete y harta compañía femenina. A mí jamás se me apagó la tele en el evento, estuve cléver y muy consciente de lo que hacía y con quién lo hacía. Una de las chicas del carrete, la más bella y matadora me dio "free pass" y estuvimos toda la noche y madrugada en lo nuestro. Lo pasamos tan bien que quedé agarrado y busqué cómo volverla a ver. Tuve su número, la llamé y se acordaba perfectamente de mí, pero al pedirle que repitiéramos la experiencia me dijo que no, que era pasado, que ella estaba a punto de casarse y que quería ser feliz con su futuro esposo. Ahí quedé y ahora ando hasta soñando con ella, estoy como embrujado. ¿Me arroja un consejo, porfa?
Juan Ignacio
Don Juanji:
Una pena lo suyo, pero déjeme decirle desde ya que su caso está perdido, como afirman los abogados. Yo soy ferviente partidario de la igualdad de hombres y mujeres, y si la dama lo eligió a usted para pasarlo regio, bien, pero era para una sola ocasión. Ella echó su canita al aire antes de contraer el "sagrado vínculo" y a otra cosa, mariposa. Mejor dedíquese a resolver puzzles, a hacer bonsai, recorrer el Persa en busca de novedades a bajo precio y a meterse en fiestoca, quién sabe si le suena la flauta y liga con otra mujer que esté a su alcance. Ya sabe, la corta con las llamadas a la novia de otro porque lo van a acusar de acoso y capaz que hasta se gane una pateadura del novio o esposo. ¿Estamos?
Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com