Está que se separa de marido que se puso roto picante

Mi marido era un tipo guapo, inteligente y, lo mejor de todo, es que era caballero. Me abría las puertas en todas partes, me ponía la silla en los restaurantes, me escribía poemas, cartas de amor y con mis padres era el futuro yerno ideal.

Doctor Cariño:

Mi marido era un tipo guapo, inteligente y, lo mejor de todo, es que era caballero. Me abría las puertas en todas partes, me ponía la silla en los restaurantes, me escribía poemas, cartas de amor y con mis padres era el futuro yerno ideal. Me casé y esto duró 10 años recién cumplidos, porque pareciera que a un día del aniversario décimo se le metió el demonio a este hombre.

Está guatón, roto, garabatero, a mi mamá la trata de vieja añeja, a mi papá no lo infla y a mí con suerte me dice hola. Me quiero separar y no sé qué hacer y cómo decírselo. Yo me cuido ene, estoy como tuna a mis 40 años y el señor este me desconoce. En fin, estoy a la espera de lo que me diga usted.

Rocío

Doña Rocío:

Aquí hay un desgaste de su persona por un señor que le falta un remezón gigantesco. Y para eso debe meterle miedo con el argumento de que no está para cosas extrañas. Se casó con él y él debe respetarla desde la primera vez hasta ahora. Si no, y dígaselo, no sirve. Usted es joven y tiene derecho a ser feliz y a ser bien atendida y reconocida.

No entiendo cómo un señor que se dijo caballero ahora se transformó en un monstruo roto, cerdo y mal educado. Si él no recapacita con sus palabras de que debe cambiar, cierre la puerta por fuera y por último quédese sola, pues es lo menor en estos tiempos donde los mastodontes sin cerebro abundan como si fuese una moda.

Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com

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