Pacto de silencio: los pilotos que bombardearon la Moneda

Protegidos por un pacto de silencio que fue reconocido por el general Matthei, una decena de nombres han salido a la luz durante las últimas décadas. Aunque algunos han sido individualizados como responsables de los disparos contra el palacio presidencial, al día de hoy no hay una versión oficial confirmada por la Fuerza Aérea.

La mañana del 11 de septiembre de 1973 cambió a Chile para siempre. Todo comenzó en horas de la madrugada, cuando el Presidente Salvador Allende fue informado de los movimientos realizados por tropas militares en el país. Al alba, el ministro de Defensa, Orlando Letelier, era detenido mientras el primer mandatario estaba a la espera de la respuesta de los soldados.

Pero luego de que el teniente coronel Roberto Guillard proclamase el golpe, el propio Allende remarcó que no se renunciaría y que tenía una “decisión irrevocable” para defender a Chile. Poco después rechazaría la oferta de abandonar el país junto a su familia, proclamando su último discurso cerca de las 10:30 de la mañana.

“Mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor”, proclamó.

Alrededor de una hora y media después, minutos antes del mediodía, el Palacio de la Moneda recibiría los ataques de parte de los cazas Hawker Hunter, enviados por la Fuerza Aérea de Chile (FACh) desde Carriel Sur, en Concepción. Aquél ataque, contra el edificio del centro de Santiago y otros puntos de la capital, marcó el inicio formal de la dictadura, marcando a fuego los últimos minutos de Allende.

Desde el momento en que se concretó el ataque, la identidad de los responsables, los pilotos que estaban a bordo de las aeronaves, oficialmente se ha mantenido en un absoluto secreto.

De hecho, el juez Mario Carroza, quien investigó la muerte de Allende, solicitó las identidades de los pilotos a la FACh sin recibir respuestas satisfactorias de parte de generales como Fernando Matthei. Este último detonó la polémica en 2011 luego de reconocer, en una entrevista con la revista Que Pasa, la existencia de un “pacto de silencio” para no revelar los nombres.

Los nombres que han salido a la luz

Posterior a las declaraciones de Matthei, el abogado Roberto Ávila, querellante en el caso de la muerte de Allende, reveló algunos nombres durante una conferencia de prensa.

Ese mismo año 2011, Eduardo Labarca, autor del libro “Salvador Allende. Biografía Sentimental”, publicó una columna en El Mostrador en donde individualizó a Ernesto Amador González Yarra (“Pekín”) como el piloto del avión que realizó el primer disparo de los cohetes antiblindajes Sura P-3, impactando de lleno a la puerta de La Moneda.

Según sus palabras, el segundo avión del ataque era piloteado por Fernando Rojas Vender (“Rufián”), quien posteriormente llegó a ser general de la Fach y cuyo primer disparo apuntó contra el techo del palacio. Desde tierra, la operación habría sido coordinada por el comandante Enrique Fernández Cortez (“Gato”).

El abogado Ávila también sumó otros nombres que frecuentemente han salido a colación en este caso, quienes habrían formado parte del grupo 8 de la FACh: el líder Mario López Tobar (”Libra”) junto a Enrique Montealegre Julliá, Gustavo Leigh Yates y Eitel von Müllenbrock, aunque este último posteriormente declaró que no se encontraba en Chile durante el golpe.

Todos ellos habrían participado en los ataques que también involucraron la destrucción de antenas radiofónicas, el bombardeo a la casa presidencial de Tomás Moro y un ataque por error al Hospital de la FACH, esto último inicialmente achacado a Leigh.

“En la Fuerza Aérea, todos estos pilotos, menos el hijo de Leigh que erró el blanco, son héroes y gozan de mucho respeto. Y Rojas Vender, que fue Comandante, era respetado por sus dotes y entre otras cosas porque había disparado contra La Moneda y había acertado. En la Fuerza Aérea, entre los militares, es cosa de prestigio”, aseguró Labarca en septiembre de 2013.

Pese a todo lo anterior, el único confirmado oficialmente es Mario López, quien en 1999 publicó un libro sin individualizar a los otros pilotos.

El Hawker Hunter presentado en el documental
El Hawker Hunter presentado en el documental

Un Hawker Hunter en exhibición y los grupos involucrados

Con el correr de los años, otras investigaciones han buscado tener la última palabra sobre el misterio de los pilotos.

El documentalista Rodolfo Gárate, responsable de “Hawker Hunter: El ruido del silencio”, recientemente aseguró a El País que uno de los aviones del ataque de La Moneda está expuesto en la base militar de la comuna de Cerrillos. La situación intentó ser negada por la FACh.

En esa misma línea, el trabajo documental también puntualizó otro orden para los ataques. Según la investigación, además del grupo 8, también participaron miembros de los grupos 7 y 9.

También plantean que Gustavo Leigh, hijo del general homónimo, en realidad habría participado en el bombardeo a La Moneda, al igual que Enrique Montealegre Jullián. Por su parte, Ernesto González solo habría participado en los ataques a una de las antenas, mientras que Mario López bombardeó la antena de Radio Corporación en La Florida. Dicha situación lo situó en una investigación por la muerte colateral de una niña de 11 años llamada Jeannette Fuentealba.

Además, la investigación agrega que Nelson Sanhueza Lagos, César Augusto Guevara Fuentes, René Alzérreca de Gortazar y Jaime Estay Viveros, del grupo 7 habrían participado de la operación. Asimismo, José Domingo Correa Ruiz, Ettore Rossi Ambrogio, Joaquín Berríos Carrasola y Roberto Urrutiaguer Vallejos, quien realmente habría disparo por el error contra el hospital, habrían participado como parte del grupo 9.

Nada de lo anterior, por supuesto, es oficial hasta el día de hoy.

Ve el documental “Hawker Hunter: El ruido del silencio” a continuación.

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