El equipo de Hernán Caputto igualó ante Paraguay en el cierre del Sudamericano, perdiendo la chance de "meterle presión" a Argentina. Sin embargo, los bifes recibieron una paliza ante Ecuador y sólo levantaron la copa por la diferencia de enchufes.
Cuando se decretó el empate sin goles entre Chile y Paraguay en el cierre del hexagonal final del Sudamericano Sub 17 de Perú, muchos lamentaron que la Roja no haya sido capaz de "meterle presión" a Argentina, que más tarde jugaría con Ecuador. Es que apenas había un punto de diferencia en la tabla, por lo que la última jornada era de infarto.
Sin embargo, pese a la hazaña del equipo de Caputto en la fecha anterior, cuando venció a Uruguay por 4-2 clasificando al Mundial de Brasil de noviembre, esta vez fue imposible romper la resistencia de los guaraníes, que también se metieron en la cita de noviembre gracias al empate.
¿Mirar el vaso medio lleno? Claro. Al menos acabaron el Sudamericano sin otra caída (en el hexagonal sólo perdieron con la Albiceleste) y convencidos de que hay varios "diamantes en bruto" que perfectamente pueden integrar el recambio. Porque de ahí a ilusionarse con una paliza a los bifes era casi imposible.
Oh, wait! ¿Qué pasó? Aunque usted no lo crea, Argentina perdió 4-1 ante Ecuador. ¡Qué! Sí, 4-1. O sea, si les hubieran encajado otro gol, Chile sería campeón del Sudamericano, pues al final la diferencia quedó en 2 para la Rojita y 3 para la Albiceleste. Por lo mismo, hasta la cuenta de Twitter de la Selección publicó la palabra "casi" junto a un emoticón sudando frío.
Así, Chile se quedó con el segundo lugar de la competencia, mientras que la sorpresa estuvo en el último lugar del lote: Uruguay. ¿El cuarto cupo? Fue para Ecuador gracias a la boleta sobre Argentina, mientras que perú, el anfitrión, acabó con tremendo cuello.
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