La vida de quien interpretó al pequeño George Little, no ha ido en la dirección que él soñaba. Actualmente el actor sueña con recuperar su carrera: “Solo quiero dar un giro a este barco”.
Durante años fue el niño adorable que conquistó al mundo junto al ratón hablador, Stuart Little, o en “Jerry Maguire” donde compartió escenas con Tom Cruise. Sin embargo, ahora a sus 34 años, Jonathan Lipnicki reconoce que su camino en Hollywood ha estado lleno de obstáculos y noches de oración.
En una entrevista reciente con People, el actor, famoso por sus papeles en “Jerry Maguire”, “Stuart Little” y “Like Mike”, habló sin filtros sobre lo difícil que ha sido mantenerse vigente en la industria del cine.
“Es totalmente válido decir que no estoy donde quiero estar en mi carrera”, admitió con honestidad. Aun así, no se da por vencido: “Rezo todas las noches para tener claridad sobre hacia dónde debo ir y tengo la confianza de que lo mejor está por venir”.

Lipnicki fue una sensación en los años 90, gracias a su papel como el tierno Ray Boyd en “Jerry Maguire”, el cual lo convirtió en ícono instantáneo. Luego vinieron éxitos familiares como “Stuart Little” y “El pequeño vampiro”.
Mientras muchos esperaban verlo crecer en la pantalla, él optó por otro camino: se alejó para estudiar y prepararse como actor. “Fue lo mejor que pude haber hecho”, aseguró.
Aunque ha seguido trabajando, mayormente en películas independientes y teatro, reconoce que los frutos no han sido los esperados. “Ha sido mitad y mitad (...) hubo cosas realmente buenas, pero nadie las vio”, expresó.
En 2024, participó en la cinta de terror “Camp Pleasant Lake”, que recibió duras críticas, y en “The Joe Schmo Show”, un reality cómico donde se permitió “mostrar su peor comportamiento”, muy fuera de su zona de confort.
“Como actor que ha crecido en esta industria, siempre quieres mostrar tu mejor comportamiento. Y ahí pude vivir mi lado más feo. Hubo algo empoderador en eso”, reveló.

Lejos de mostrarse derrotado, Lipnicki parece más enfocado que nunca. En el último año rechazó cinco películas porque busca proyectos que realmente valgan la pena. “Solo quiero dar un giro a este barco”, dijo.
Y aunque Hollywood no siempre ofrece segundas oportunidades, él no ha perdido la fe: “Creo que si vas a perseguir esto, te haces un flaco favor si no sueñas en grande”.
“Esto es lo que quiero hacer por el resto de mi vida, y creo que solo tienes que creer que va a suceder y hacer todo lo posible para tomar acción en la dirección correcta”, explicó.

En 2017, Lipnicki reveló que su paso por Hollywood no lo dejó con buenos recuerdos en lo que respecta a su vida personal.
De hecho, confesó haber sido víctima de bullying durante el colegio, lo que le causó ansiedad y ataques de pánico.
“Se burlaban y decían que nunca volvería a trabajar. Me hacían sentir como basura todos los días en la secundaria, al punto de tener ataques de pánico cada noche antes de ir a clases”, indicó el actor.
“En la secundaria, un chico me llamó ‘has-been’ delante de toda la clase de Economía. Fue humillante”, recordó.
A pesar de lo difícil de esta época, Jonathan lo toma con optimismo y esperanza: “Me enseñaron lo importante que es perseguir tus sueños, sin importar lo que digan los demás. Es asombroso cómo la gente más cruel alcanza su punto máximo en la adolescencia”.