Los autores de “Los piratas” agendan cuatro conciertos a comienzos de febrero. El carismático “francés” Bernardou atendió al diario pop, recordó parte de la vasta trayectoria del grupo y le tiró flores al género urbano chileno, Flor de Rap, Pailita y Marcianeke son sus favoritos contó.
Sus canciones están en el corazón de los latinos, hits de la talla de “La Guitarra”, “Loco (tu forma de ser)”, “Corazón”, “El murguero”, entra tantas otras, son parte de la memoria colectiva de esta parte del mundo, así podemos presentar de manera muy breve a Los Auténticos Decadentes, aunque la definición se queda corta.
El numeroso conjunto formado en 1986 se ha caracterizado por su estilo carretero, el cual junta el ska, rock y distintos ritmos latinos. Recientemente vienen de cerrar la trilogía que significó ADN, discos que tributaron a distintos exponentes que influenciaron a los trasandinos como Sumo, Andrés Calamaro, Gilda, The Cure y varios más.
Chile es uno de los territorios que adora su música, por ejemplo, Santiago es la segunda ciudad que más los escucha en el mundo con más de medio millón de oyentes mensuales en la plataforma Spotify.
Asimismo, no es raro verlos a lo largo de nuestro país en distintos momentos del año, este 2024 no es la excepción, puesto que se presentarán en el Gran Arena Monticello (1 de febrero), Caupolicán (2 de febrero), Fiebre del Memo (3 de febrero) y Casino Enjoy de Viña del Mar (4 de febrero). Ya se presentaron en Aysén el pasado 29 de enero.
Por esta visita es que uno de sus integrantes originales, Gastón “El francés” Bernardou, percusionista de la agrupación, habló con La Cuarta para palpitar lo que preparan. Por otro lado, abordó un poco de la historia de la banda, la polémica de Peso Pluma en el Festival de Viña y de su gusto por la música urbana.
—¿Cómo también analizas el 2023 para la banda y para ti igual como músico?
—Y el año pasado estuvo espectacular, fue increíble, tocamos por todos lados, hicimos un montón de shows, en Chile, Argentina, Perú, Colombia, Ecuador, Estados Unidos. Hicimos una gira muy grande. Así que muy contento de todo lo que se está dando con Los Decadentes, la banda sigue como dice la canción, tocando que es lo lindo. Gustó eso siempre desde que empezamos a tocar, divertirnos y divertir a la gente, hacerla pasar bien que es lo principal. Lo que siempre la gente nos rescata es la buena onda, el humor y la alegría.
—¿Se puede decir que la banda desde 1986 siempre ha sido más de en vivo que de estudio?
—Totalmente, siempre fue una banda muy en vivo, muy para ver, para sentir, para bailar, para disfrutar. Y de verdad con los años aprendimos a grabar mejor. Pero sí, Los Decadentes es una banda que definitivamente es para escuchar con amigos, familia, para gozar en vivo totalmente. Estoy de acuerdo, siempre fue así.
—También vuelven nuevamente a Chile. Van a tocar el 1, 2, 3 y 4 de febrero, hartos shows, ¿cómo lo hacen para estar siempre activo? ¿imagino que hay un cansancio físico también?
—Sí, tenemos algunos shows los fines de semana, giras a veces intensa, pero la verdad que la música, la buena onda de la gente, te ponen las pilas y también estamos ya un poquito entrenados, ya sabemos.
“Tenemos también un show muy importante en el Caupolicán. Que es un lugar emblemático y hemos estado en muchas ocasiones. Siempre que hacemos shows en Santiago queremos tocar en el Caupolicán porque hay mucha gente que quiere ver un show largo y escuchar más canciones, a diferencia de un show festivalero que es más cortito”.
—También ya tienen un público transversal...
—A través del tiempo tenés todo tipo de público, gente de nuestra época que viene desde el principio, después chicos jóvenes que se enganchan a través de la familia o que te dicen, ‘los escuchábamos en el auto cuando viajábamos con mi viejo’ o te cuentan anécdotas o cosas que les llevan las canciones a momentos de la vida. Es muy linda esta relación que tenemos con el público.
“Nosotros cambiamos el chip”
Con trece discos de estudio, cinco álbumes en vivo y tres recopilatorios la agrupación bonaerense suma un repertorio prolífico, avalado por más de treinta años de trayectoria y giras en distintos países. Unos bichos raros al comienzo que fueron rechazos por el establishment más duro del rock de su país, sin embargo, con los años han ganado un valor notable.
—¿Gastón, tú por qué crees que en Chile, en Latinoamérica, Los Auténticos Decadentes son parte de la playlist de las familias? Más encima son distintas épocas, ¿por qué crees que quedaron tanto en la familia latina?
—Para mí un poco porque siempre hemos sido una banda que mezclamos mucho y lo que es la música popular, de baile, de pueblo, la mezclamos un poquito con reggae, poquito de rock más modernizado, pero siempre tuvimos una base muy popular en lo que nos gusta a nosotros como música. Cuando hicimos la banda dijimos que tenemos que ser una banda de fiesta, por eso agarramos la cumbia en ese momento, que era también una música muy popular de barrio, el cuarteto de Córdoba, música brasilera, candombe, siempre hay música de joda, tratamos de buscar para ese lado. Y las letras también a veces son bastante costumbristas, que hablan un poco de leyendas urbanas o de amor, cosas que también a la gente las representa.
—En esos primeros años la banda era bien barrial, comparado a sus colegas que iban por otros estilos, más de corte new...
—La verdad que nunca nos parecimos a nada, en el momento éramos completamente extraños. Después, con los años se mezclaron más las cosas, por suerte también con la gente tuvimos que ver un poquito en eso, de no tener prejuicios. Nunca estuvimos de moda. Si bien después muchas de las cosas que hicimos empezaron a hacerlo muchas bandas, en Chile hay un montón de bandas que tienen esa inspiración. Nosotros cambiamos el chip y en vez de irse redoblante empezamos sobre bombo y después se vino de una música así, con el tiempo cambió completamente y se hizo todo más centroamericano.
—¿Fue muy complicado mostrar esa estampa de llegar a las radios o buscar shows?
—Sí, totalmente. De hecho, las primeras canciones no se pasaban por radio, tuvimos el primer disco, salió y estuvimos dos o tres años e íbamos mucho a la televisión y después íbamos mucho a la discoteca. Y como que era una banda que se pasaba en los boliches y era una onda que las radios no entraba porque como tu decías era una música muy extraña. Hay que decir que tampoco tocábamos tan bien. Pienso que el tema “Loco (tu forma de ser)”, que era un tema lento, romántico, que dos o tres años de que salió el disco como que llegó a la radio, ya hizo que la gente empiece a conocernos más.
—Otra cosa que me llama la atención, están desde 1986 y tienen hartos integrantes originales de la banda, ¿cómo lo hacen para seguir juntos?
—Sí, me parece que aparte de la amistad que empezamos con una banda de amigos y se fue dando, digamos que después logramos seguir tocando y trabajar. No queríamos trabajar, terminamos trabajando, ja, ja, ja. Y nos terminamos casando, todo lo que dijimos que no íbamos a hacer lo hicimos todo. Bueno, nosotros lo que nos gusta es hacer música y eso me parece que es el motor que mueve que estemos juntos. Luchamos mucho para llegar para todas las cosas que hicimos. Nos costó mucho, mucho trabajo, la banda aprecia mucho el esfuerzo que hicimos y apreciamos la banda, entonces eso es importante también, cuidamos lo que tenemos.
Peso Pluma y el género urbano
Los Auténticos Decadentes son el segundo exponente argentino que más veces ha visitado el Festival de la Canción de Viña del Mar con un total de cuatro ocasiones, solamente superados por Fito Páez (5 veces). Bernardou incluso fue jurado de la competencia en 2017, así que es voz autorizado para opinar de la actualidad del género urbano y la resistida participación de Peso Pluma en el “Festival de los festivales”.
—Cambiando de tema, tú fuiste jurado de viña el 2017. Hay una polémica ahora porque algunos políticos como académicos no quieren que se presente el Peso Pluma en el festival por el contenido de sus letras y promover la “narcocultura”, según ellos, ¿qué opinas de esto?
—Algo escuché, para mí tiene que cantar, no creo en la censura y todo eso, hay de todo y yo no censuraría a nadie en general y es un artista que es muy conocido. El que le gusta ese día lo va a ver en televisión y a la gente que no le gusta que no lo vean, digamos no es obligatorio.
—¿Vivieron alguna vez algún tipo de censura o prejuicio?
—Más que censura en todos lados, todas las compañías discográficas nos rebotaban. Tuvimos que hacer el disco independiente y todo. Pero así lo que es censura y cosas así no, por suerte no.
—Hablando de urbano, ¿cuál es tu visión del urbano argentino?
—Me encanta toda la movida, puesto que yo soy DJ, paso un montón de música, yo paso más clásicos en general, pero a veces también conozco lo que va saliendo y todo lo que es de Argentina. La verdad que estoy orgulloso de toda esa camada, de una generación de una nueva música que a los chicos los representa y que hace un montón de pibes de Argentina.
“Aquí en Chile también hay un montón. Te digo cuando yo paso música paso de Chile, y en la discoteca paso estos temas que les digo medio en joda de TikTok, que es pura música urbana de Chile”.
—Se escucha harta música local...
—Yo prefiero que sea música chilena o argentina que vengan de cosas yankees o que vengan de Inglaterra, Inglaterra no molesta, pero me gusta cuando la gente te pide y quiere escuchar la música del país. Vos entrás en las listas principales de Spotify y en Chile treinta de las cincuenta de las canciones que se escuchan son de Chile. En los 80′s tu entrabas y habían tres o cinco. Yo estoy muy feliz que pase eso y que la gente busque su propia onda y no copie tanto, sino que si bien se inspiran porque son cosas parecidas en muchas cosas, en los ritmos, en el estilo, pero cada lugar le ponen su acento, su onda, su lenguaje.
—¿Y qué te gusta del urbano chileno?
—Flor de Rap me gusta, mi compañera de Master Chef, me enganché con ella, reina total y después de todos los pibitos, Pailita, Marcianeke. Conozco los temas, no me sé los nombres, tengo que buscarlos. Pero si yo me pongo a escuchar, voy por los clásicos, Los Bunkers, Chancho en Piedra, Los Tres, Los Tetas. Hacíamos shows juntos, todas esas bandas clásicas de Chile.
“Quiero tocar la guitarra todo el día...”
Durante este año los creadores de “Un osito de peluche de Taiwán” tras terminar su tour estival que los tendrá en Paraguay, Chile, Argentina y México, esperan comenzar a armar su siguiente disco.
En tanto, los tickets para su espectáculo en Gran Arena Monticello y en la Fiebre del Memo se pueden conseguir en Topticket y Passline, respectivamente. Por su parte, sus eventos en Viña del Mar y en el Teatro Caupolicán están disponibles en Puntoticket.