Gustavo Carrasco nunca lo pensó. Acostumbrado a trabajar entre los muertos, al propietario de la funeraria "Hermanos Carrasco" jamás se le pasó por la cabeza la posibilidad de asustarse con los vivos.

Anoche fue todo distinto para él. Habituado a vestir de gris y a ver a pocas almas durante el día, las más de dos mil personas que rodearon su local de la comuna de Independencia haciendo una interminable fila para participar del casting del próximo reality de TVN, "El juego del miedo", terminaron por botarle más de un pelo al empresario fúnebre.

"No sé si repetiría esto, tendría que pensarlo y conversarlo con mis hermanos, porque ha sido demasiada gente", se quejó el angustiado hombre, mientras cientos de fanáticos del suspenso se abalanzaban sobre Carlos Pinto para pedirle una oportunidad.

"¡Ayúdanos, poh, Carlos Tintooo!", le gritó de manera incesante una tropa de postulantes de diversas edades, quienes esperaron desde las dos de la tarde de ayer para ser partícipes del brillo que comenzó cerca de la medianoche.

"Fue una locura, esperábamos 200 personas y llegaron más que al casting de "Pelotón" en el Parque O'Higgins", contó el hombre detrás de "Mea Culpa", quien se dedicó a entrevistar a parte de los aspirantes consultándoles si tenían fobias o la capacidad física para ser parte del desafío.

Ingresados de a dos, los postulantes se tuvieron que fotografiar al interior de un ataúd, sólo por postular al programa que comenzaría en enero y que irá de lunes a viernes, con la dirección de Nicolás Quesille.

Jorge Ruz Arias