Michelle Carvalho sacó el habla tras el sobajeo a sus pechugas

Arena, sol, mar azul y agarrones a manopla completita, fueron parte del deleite que tuvo Michelle Carvalho en sus vacaciones junto a Eugenia Lemus en Aruba. Es que la ex de Joche y Cristian Menares subió un videíto en Keek en el que sapeó a una fogosa bartender que se ganó su propina al chantarle un copete, zamarrearle la mollera y masajearle las gominolas.

"Después de harto tiempo encerrada, salí de vacaciones y nada, donde hay playa y copete se pasa bien", comentó la garotiña tras la tonta parranda.

- Por lo que vimos te dateaste del trasnoche playero.

- El carrete es mucho más prendido que acá (en Chile), las fotos que subí son del día que salimos, por último para contar que me fui de fiesta.

- ¿Y en qué volá se fue la garzona que te sobajeó las bubis?, ¿era cordobesa?

- Imagínate que ese video fue a las once, allá el carrete empieza temprano. A la medianoche estábamos en el hotel. Y bueno, me agarró de sorpresa. Estábamos ahí y era como un servicio a la mesas, venían como a entretener y cada uno hicimos un video. Eugenia y su novio también tienen uno.

- Hablemos de las nenas, porque no quiero ni saber lo que le frotaron al sociate.

- A mí me tocó primero, como que me trajo un jugo azul, no era un trago porque no tenía sabor a alcohol cuando menos lo esperé me tocó las pechugas. Pero fue re buena onda, hacía eso con todas las chicas del bar, con Eugenia también.

-¿Y era brusca, tenía las uñas muy largas?

- Fue normal, como jugando.

- Obvio, si jugueteando uno siempre le agarra las pechugas a alguien.

- Yo lo encontré simpático porque lo hizo como con 50 mujeres y todos cagados de la risa. Si hubiera sido un hombre habría sido como indecente, pero te repito: era mujer, estábamos de vacaciones pasándola bien y me reí mucho. Lo que pasó en Aruba, queda en Aruba.

- Parece que quedamos con ganitas de volver por un happy hour.

- Fue bonito, pero antes de volver para allá me gustaría conocer otros lugares más. Ir a Cuba, por ahí, quién sabe.

- ¿Quizás para conocer a un garzón mulato de manitas grandotas?

- No, no creo (risas).

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