El récord del divorcio más caro de la historia de las estrellas de la música británica se acaba de anotar el  cantante Phil Collins. Para no verle nunca más la cara a su tercera esposa Orianne Cevey, el ex Génesis, de 57 otoños, sacó del bolsillo la gigantesca suma de 25 millones de libras, que vienen siendo 47 millones de dólares y pa' nosotros, afírmense, casi 25 mil millones de pesolios.

Con Cevey, suiza de 35 años, Collins tuvo dos retoños, Nicolas, de ocho, y el chiquitín Matthew de cuatro pepitas. Todo iba viento en popa entre ellos hasta que el 2006 no se aguantaron más y se mandaron a la punta del cerro, luego de siete años de estar juntos.

Tras el finiquitado divorcio, el artista británico, como es querendón con sus cabros chicos, decidió instalarse con camas y petacas bien cerquita del palacete de su ex, para así regalonear a toda hora con su hijos.