La orientación programática de TVN no dio para segundas lecturas. Que en el capítulo del 2 de abril pasado del programa La Tierra en que Vivimos, el conductor Sergio Nuño le prestara ropa a la Celulosa Arauco en el caso por la muerte de los cisnes de cuello negro en Valdivia y, además, luego trabajara para ellos, terminó por generar la extinción del programa ecologista.

Según el realizador, los pajarracos del río Cruces ahuecaron el ala porque se quedaron sin luchecillo, su principal alimento, y no por consecuencia de Celco.

"Me están condenando por haberme atrevido a hablar y están buscando ensuciar mi honra", se defendió Nuño en entrevista con La Cuarta, medio por el cual se enteró que la medida se había hecho pública (ver recuadro de arriba).

"Quieren mi cabeza, quieren liquidarme. Y lo hicieron. Me dijeron que no tengo honra, que soy un vendido, ¿ qué más quieren? Ya no necesitan matarme, ya estoy muerto, no tengo nada que hacer ya", pataleó ante tanta mala onda el casero de los helicópteros.

- ¿No llevarías tus programas a otros canales?

- Lamentablemente en Chile el único canal que tenía la posibilidad de ser neutro era TVN. El objetivo de Chilevisión es el comercio, los otros (Canal 13, Mega, La Red) también buscan el lucro.

-¿Colgarás los guantes ambientalistas?

- No me echaré a morir, tengo claro que no seguiré haciendo La Tierra en que Vivimos, que se terminó una etapa de mi vida. No haré tampoco documentales para empresas, aprendí la lección.

- ¿Y cómo pararás la olla?

- Volveré a mis orígenes. En Costa Rica, Paraguay, Uruguay y Miami se han mostrado muy interesados en mi trabajo.

EL 7 LO HIZO OFICIAL MÁS QUE RÁPIDO

Pasado el mediodía de ayer, Sergio Nuño se reunió con la todavía caporal de TVN, María Elena Wood (quien renunció al canal, pero recién se vira a fines del próximo mes), para conversar sobre el atado de Celco y los cisnes de cogote negro. Ahí mismo se decidió la suspensión (a falta de 3 capítulos) de La Tierra en que Vivimos.

Sólo horas después, TVN lo hizo público comunicando: "El canal está reuniendo los antecedentes respecto de conflictos de interés no declarados de la productora externa que realiza el programa, y la eventual vulneración de las Orientaciones Programáticas de TVN, las que forman parte de los contratos del canal".