Para las nuevas generaciones de califas, Selena Gomez es el rayito de sol que brilla entre la tormenta mediática. Su belleza, sensualidad y despliegue en la escena artística, hacen de la chiquilla una de las pocas jóvenes talentos hollywoodenses cuyos atributos nadie discute y todos alaban.

Bien por sus seguidores, pero no tanto para ella. Claro, mantener la línea, no meter las patas frente a las cámaras y mejorar día a día, es la pega que le tocó a Selenita desde que cumplió 10 años. ''No he tenido la oportunidad de averiguar sobre mi vida sin que la gente tenga una opinión de mí a cada paso'', explicó la lindura, tras posar para el lente de la revista GQ.

La reciente sesión fotográfica que se revelerá por completo durante los próximos días, fue la instancia en que la ex de Justin Bieber aprovechó para hablar sobre su carrera. Eso sí, tampoco se desgastó en darle color a sus dramas. "Elegí esto, así que no voy a sentarme aquí y decir: 'Oh, Dios mío, pobre de mí, no tuve una infancia normal'. Me importa un carajo eso", aclaró.