El pasado marzo falleció Horst Paulmann a los 89 años, siendo una de las personas con mayor cantidad de dinero en el país. El reconocido empresario era dueño del 25,7% de Cencosud, y antes de su muerte dejó dos testamentos, uno con fecha del 6 de julio de 2018 y otro del 26 de enero de 2022, ambos permanecen en una notaría de Providencia.

Ahora se sabrá el destino de la fortuna del magnate, cuando el 20 Juzgado Civil fije la fecha de una audiencia para la apertura de los dos testamentos. De acuerdo a la información entregada por La Tercera, los abogados tendrán que validar que se trata de los documentos que realmente dejó Paulmann cuando los textos se abran.

De acuerdo a la normativa vigente, la repartición de los bienes del empresario tiene un orden determinado. El medio citado establece que el 50% del patrimonio de Horst Paulmann va directamente a sus cuatro hijos, ya que a su muerte era viudo, su exesposa, Helga Koepfer, falleció en 2014.

El difunto no se volvió a casar, pero sí tuvo otra pareja, Katherine Bischof de 50 años, madre de su hijo menor.

Los hijos de Paulmann

El empresario de 89 años tuvo cuatro hijos, tres en su matrimonio con Helga Koepfer. El mayor es Manfred Paulmann, quien cumplió 58 años este fin de semana, luego viene Peter, de 56 años, y la tercera es Heike, quien cumplió 55 en febrero.

El cuarto hijo del empresario nació recién en 2018, por lo que cumple 8 años en junio. Horst Paulmann tenía 83 años cuando nació su último heredero. Los cuatro hijos se deben repartir en partes iguales la mitad de todo lo que estaba a nombre del magnate del retail.

La otra mitad debe ser distribuida por el testador, considerando que un 25% denominado la cuarta de mejoras, y puede ser destinada a favorecer a un conjunto limitado de personas: solo los herederos forzosos: cónyuge o hijos o padres.

De acuerdo a La Tercera, “el último 25% es la denominada cuarta de libre disposición y puede ser destinada, en la proporción que el testador determine, a cualquier persona, tenga o no parentesco. Por ejemplo, a todos o alguno de sus hijos. O a los hermanos que siguen vivos. O a su última pareja, quien en el funeral de Paulmann contó que lo conoció hace más de 15 años, en 2009, en uno de los locales de Jumbo. O a alguno de sus exasesores cercanos o a personas de confianza”.