Poco más de dos años de cárcel completa hasta ahora Yesenia, la madre que fue condenada por disparar al padre de su hija, tras descubrir que abusó durante años de la pequeña niña.

Fue en enero de 2023 cuando, paseando de la mano por el campo, la mujer quiso preguntarle a su hija: “Tu tía me contó algo que tú le contaste anoche”. La niña, de entonces 7 años, la quedó mirando y le dijo, con seguridad: “Mamá, te lo prometo que es verdad”.

El hombre venía abusando de ella desde que tenía 4 años, en San Antonio, Región de Valparaíso

Fue un doloroso golpe que cambiaría para siempre la vida de Yesenia. “La abracé, lloraba y le pedía perdón. Perdón por no haberme dado cuenta antes”, relató la madre a Chilevisión Noticias, desde la cárcel.

No tardó en tomar una decisión. De madrugada, saltó la reja de la casa del sujeto, tomó un arma que él mismo guardaba y lo encaró. El hombre reaccionó con violencia y todo se precipitó.

“En eso yo saco el arma y le disparo en el brazo, para que me soltara. En eso llega el papá y el hermano de él y entre los tres me empiezan a pegar en el suelo. Ahí disparo por segunda vez (...) Él me ahorcaba en el suelo diciendo que me iba a matar”, relató.

Todo terminó con la llegada de Carabineros y la detención de Yesenia.

Fue condenada a 8 años de cárcel y pide indulto

Pese a que lo negó en un principio, el sujeto terminó condenado a 18 años de presidio por abusos y violación de menor de edad. Al mismo tiempo, Yesenia recibía su propia condena, de 8 años por homicidio simple en grado de frustrado y porte ilegal de arma.

La madre hoy pide el indulto presidencial. “Yo fui condenada antes de que a él lo declararan culpable. Entonces hay suficientes pruebas de que yo no estoy mintiendo (...) Es injusto, siento que no me creyeron o no se pusieron en mi lugar”, comentó al noticiero.

Yesenia recordó, además, que ella también fue víctima de la violencia del papá de su hija. Sufrió golpes, abusos y agresiones psicológicas de por más de una década, incluso frente a más personas.

Por eso, aseguró, cuando tenía el arma entre sus manos, sentía que debía defenderse: “En ese momento veía mi vida en juego, frente a mi peor enemigo. Mi peor enemigo”.

El caso recuerda al reciente indulto de Katty Hurtado, la mujer que dio muerte a su exposo al defenderse de una agresión.