Una cruce de alto impacto protagonizó el abogado Maximiliano Lobos y el exdiputado Renato Garín, quienes debatieron en un reciente capítulo de Sin Filtros.

Sin embargo, las diferencias habrían escalado a los insultos y la censura. Así al menos lo denunciaron ambos involucrados.

Recuperó el video “censurado”

A través de X, Lobos aseguró que “la producción de @Sinfiltros_tv decidió censurar mi opinión contraria a la de @RenatoGarinG. Me llamaron de la producción para darme un explicación que a mí parecer no satisface el estándar democrático y las normas sobre libertad de expresión. Aquí les dejo el video censurado”.

“Quiero decir que durante la tarde reflexioné sobre la explicación que me dio el programa, y en un primer momento callé por miedo a que no me invitaran más. Pero luego reflexioné, y no estaré dispuesto nunca a transar mis principios democráticos o a soportar una censura por miedo a perder un espacio en los medios. Los principios están primero, y como fundador de un movimiento político que defiende la libertad de expresión, tengo el deber antes que todo de ser leal con mis valores”, sentenció.

Acusó insultos

Por su parte, Garín reaccionó al video y entregó la siguiente descripción: “Un hombre con ojos en tinta, ojeras profundas y un enojo sobrenatural. Se apaga la cámara y lanza insultos. Su objetivo: grabar este video y encarar al contendor. Es fácil jugar a ser el fascista televisivo en este contexto, apoyado por debajo por Sebastián Eyzaguirre y compañía”.

“Aprende a ser un verdadero hombre, Rellanto Cahuín... supongo que te puedo decir así después que me calificas de ‘fascista’ (...) Aprende a aguantar la confrontación de opiniones en un debate político. De lo contrario no tienes la suficiente entereza emocional para estar en política”, respondió Lobos.

Sin embargo, el otrora parlamentario no se quedó atrás y replicó con todo: “¿Y de cuando un fascista televisivo y cobarde como tú, que grita maricón como si fuese choro, representa al pueblo de Chile?”.

“Eres un sujeto dañino, ayer estabas evidentemente arriba de la pelota de aquello que te metes, esas ojeras, ojos en tinta, tu enojo insólito, igual que la izquierda gris y resentida. No tengo la culpa que seas pobre y endeudado”, sentenció.