Cabe recordar que, hasta hoy, los imputados eran cuatro delincuentes: tres de 16 años y uno de 18.
Durante la madrugada de este lunes se confirmó la detención de un quinto implicado en el asesinato del ciudadano francés Dimitri Weiler, quien fue víctima de un violento asalto al interior de su casa en el sector Chicureo de Colina.
Según información policial, el aprehendido es un adolescente de 15 años, quien fue retenido al interior de su casa en La Pintana. El aludido sería parte de la banda que mató al extranjero frente de su familia.
De acuerdo a CHV Noticias, este quinto antisocial es conocido con un apodo en el mundo delictual, mismo sobrenombre que una de las víctimas habría escuchado en varias ocasiones durante el brutal asalto.
Cabe recordar que, hasta hoy, los imputados eran cuatro delincuentes: tres de 16 años y uno de 18, quienes quedaron en internación provisoria y prisión preventiva, respectivamente.
Los detalles del asesinato en Chicureo
A fines de febrero, el padre de familia había llegado desde Francia para celebrar el cumpleaños de su hijo menor, de sólo seis años.
Cuando ya estaban durmiendo, a eso de las 3:00 de la madrugada, sintieron ruidos en el pasillo. Era un grupo de delincuentes. Paula (su esposa) dormía en una pieza, su hija en otra y en la tercera estaba Dimitri y su hijo.
Los atacantes golpearon y maniataron a la mujer y a la adolescente, para luego dejarlas en el suelo del pasillo. Desde allí Paula sintió llorar al pequeño y vio cómo el padre forcejeaba con los ladrones.
“Fue en ese momento que escuché que Dimitri se quejaba, pensé que lo golpeaban, porque comenzó a forcejear para que no sacaran a nuestro hijo”, relató.
En un momento la levantaron para que entregara sus joyas. “Vi en el dormitorio a mi marido y al preguntarle en francés si se encontraba bien, uno se enojó y comenzó a golpearlo nuevamente”, contó.
Tras ello, los sujetos cargaron objetos en los dos autos de la familia y huyeron. La mujer atinó a correr a casa de su madre, muy cerca, y llamó a Carabineros. Luego, regresó a ver a Dimitri.
“Volví y había mucha sangre por todos lados, se sentía mal, no se podía mover”, recordó. Al hombre “le costaba respirar” y le dijo a su esposa en francés: “Se acabó”.