La posible contaminación del pozo de agua del hospital base de Linares podría ser la causa de los diversos achaques que han aquejado en los últimos días a 31 funcionarios del establecimiento de salud.

El hospital, principal centro de referencia del Maule sur, se refirió a través de un comunicado a la situación que se vive en la institución indicando que "en relación al probable brote de infecciones entéricas ocurridas a algunos funcionarios de nuestra institución, el Departamento de Epidemiología junto a personal de Salud del Ambiente se encuentra trabajando en los análisis efectuados a las muestras de agua, las cuales son analizadas en nuestro laboratorio y en el de Bromatología Regional".

En el hospital afirman que se han tomado todos los resguardos necesarios tendientes "a eliminar la probable causa".

Aunque aún no se conocen los resultados oficiales de las muestras tomadas y que son analizadas en el laboratorio, el establecimiento médico indica que "los exámenes efectuados a los funcionarios afectados resultaron negativos para enteropatógenos".

Pese a lo anterior, aunque en un primer momento se habló de cinco funcionarios afectados, los antecedentes recopilados en las últimas horas cifran en 31 los funcionarios del hospital afectados con diferentes sintomatologías que podrían tener relación con la posible contaminación del agua del pozo del hospital, y donde varios de ellos han presentado cuadros diarreicos.

La mandamás de la Fenats del hospital, Sofía Lara, manifestó su preocupación por lo sucedido, indicando que esperaban "que las muestras llegaran a la brevedad como una forma de clarificar los hechos por el bien de los colegas afectados y por la imagen del hospital", reconociendo los esfuerzos del director Rubén Bravo "por dar una rápida salida al tema" y las indicaciones emanadas "que buscan evitar que más colegas puedan verse afectados".