Séptima semana de estallido social y los resultados de la última encuesta Plaza Pública Cadem de noviembre exhiben que la aprobación del Presidente Sebastián Piñera se desplomó hasta el 10%, alcanzando mínimos históricos, mientras que su desaprobación alcanzó el 82%.

La muestra dejó en evidencia que su aprobación bajó en dos puntos (12%) según la medición anterior.

Para el cientista político, Patricio Navia, el diagnóstico de la ciudadanía es claro. "El Presidente Piñera está solo. Los que votaron contra él no lo quieren, y los que votaron por él ya lo abandonaron. Entre la derecha, hay más rechazo que apoyo", indicó el analista.

Para el analista político Libardo Buitrago los números reflejan "la profundidad del momento que se está viviendo. El problema que se deriva de las reivindicaciones sociales planteados y el problema de la violencia. Y cuando estos dos factores se cruzan, baja la popularidad de un mandatario".

Agregó que "los problemas de seguridad se le atribuyen directamente al mandatario y no al ministro del Interior. Piñera puede seguir bajando un poco más".

El analista Guillermo Holzmann sostuvo que la baja representa "un costo político que está pagando por la conducción de la crisis. Primero, la critica transversal por los que votaron por él, oposición e independientes indecisos en contra de la oportunidad de las decisiones que ha tomado. Segundo, por su capacidad de mantener el orden público y en tercer lugar por no generar el ambiente de seguridad y tranquilidad que se necesita".

Protestas contra Piñera

De acuerdo a la medición, las formas de manifestación que genera más rechazo para los encuestados son los saqueos y robos al comercio, con un 96% de desaprobación.

Un 84 por ciento va en contra de los rayados en calles y monumentos, 78% rechaza a los encapuchados, 71% contra las barricadas y cortes de camino y 58% desaprueba "el que baila pasa".

No obstante, un 67% de los chilenos sigue apoyando las movilizaciones por la crisis social, y entre las que lucen más aprobación destacan los "cacerolazos", con un 89% de aprobación. Las funas a los políticos, con un 64% y los paros y huelgas generales del sector público, con un 58%.

FF.AA.

Según Cadem, un 59% de los consultados está de acuerdo con que las FF.AA. puedan resguardar infraestructura crítica del país y un 39% se muestra en desacuerdo.

"La gente quiere que se restablezca el orden público. La gente no quiere violaciones a los DDHH, pero tampoco quiere saqueos", agregó Navia.

Para Buitrago podría haber sido más alta incluso: "Después de la quema de estaciones de Metro, la gente espera que el Estado garantice y cuide los suministros y servicios básicos y los que tienen la fuerza, FF.AA. y Carabineros, son los llamados a hacerlo".

Para Holzmann "aumenta el respaldo a FF.AA. como esa imagen capaz de instaurar el orden público".

Eso sí, un 56% se manifiesta en contra de un nuevo estado de emergencia.