Flor de condoro se mandó un joven bombero de Lonquimay el año pasado. El pastelito quemó un colegio de la ciudad por puro gusto, dejando a 460 alumnos sin establecimiento.

Resulta que este sábado se efectuó la audiencia de lectura de sentencia para el ex "Chico Bueno", identificado como Patricio Garrido, quien fue condenado a siete años de presidio efectivo por el delito cometido.

El fiscal de Curacautín, Iván Isla, se mostró conforme con la condena, esto porque se condice con la gravedad del delito y además es lo que el Ministerio Público había solicitado en las audiencias anteriores, según informó el portal SoyChile.

Cabe destacar que Garrido ya estaba en prisión preventiva desde que fue formalizado por el hecho el 29 de marzo pasado, luego de que un testigo presencial declarara haberlo visto iniciar el fuego que redujo a cenizas la escuela.