Ya se estaban levantando los últimos puestos en la feria rotativa de Calama cuando todos quedaron ¡plop! al ver una camioneta metiendo bulla con dos camellos en su carro de arrastre.

Eran los cabros del circo "Los Hermanos Fuentes Gasca" haciendo promoción de su espectáculo en la población Independencia.

En paralelo al vocingleo circense, Roberth Durán, de 28 años, y su señora Romyna Calcina, de la misma edad, iban tranquilamente a comprar sus verduras junto a su hijo.

Justo en la esquina de Dinamarca con Canadá quedó la tendalá, porque la pareja se acercó demasiado a los camélidos y pese a que Roberth le gritó "¡cuidado!" a su patrona, ella sólo alcanzó a agachar la cabeza al tiempo que un camello estiró el cogote y le metió los dientes en el cráneo.

"Yo estaba a unos 10 metros y veo cuando el camello saca la cabeza y muerde a la señora. Le agarró la cabeza compadre", relata José Castillo, testigo del incidente, quien sintió el terrible grito de la mujer.

Romina, quien quiso salir digna frente al público que al toque se arremolinó ante la escena, empezó a caminar como si aquí no ha pasado nada, señores.

Discusión 

Pero la escena cambió de color cuando un líquido rojo que manaba de su cabeza empezó a manchar la vereda.

"Uno de los encargados del circo le dijo a la señora que el camello la había agarrado por andar toda chascona", confidenció José Castillo a La Cuarta.

Roberth se devolvió a discutir con los cabros del circo y, al no conseguir nada, llamó a Carabineros para denunciarlos.

"El sol estaba fuerte a esa hora, yo creo que estaban estresados los camellos, si después otra señora se quería sacar una foto y el camello intentó agredirla también", expresó Castillo.

Luego de pasar por el hospital, Roberth escribió en su Facebook: "El personal del circo no debería por qué estar realizando propaganda con los animales en la calle y menos en la situación que los tenían, pero ellos (las bestias) no tienen la culpa".