Saltando en una pata están los mandamases de siete restaurantes de la caleta Tumbes, en Talcahuano. Es que después de años de espera, al fin lograron que sus locales recibieran el certificado de sanidad, lo que permitirá que de aquí en adelante trabajen sin ningún atado.

Los locatarios esperan ahora que la barra llegue en patota a probar los pulentos aperitivos que les tienen preparados, y así tire pa' arriba también el turismo gastronómico que se pretende impulsar en dicha zona.

Una de las mejoras que se hizo para conseguir el famoso cartoncito fue la renovación de los diferentes recintos con agua potable, alcantarillado y agua caliente, entre otros chiches.

A la secre de la Agrupación de Dueñas de Restaurantes de la Caleta Tumbes, Erika Cerna, no le sacaba nadie la sonrisa del caracho, pues dijo que "nos había costado mucho llegar a esta meta, pero lo conseguimos. Ahora lo único que esperamos es que la gente de los alrededores nos vengan a visitar para poder seguir levantándonos", pitió la secre.

Claro que los más contentos deben ser los vecinos de los alrededores, porque ahora tendrán harta variedad para engañar el diente y para comer sanito sanito, como Dios manda, pues.