Junte chauchas, rompa el porcino, haga horas extras o empiece a trotar. El ministro de Transportes, René Cortázar, confirmó que la gratuidad del pasaje de vuelta, que duraba 2 horas, no irá nunca más en la vida. La medida no tiene fecha de salida, pero está oleado y sacramentado. Ojo, que los trayectos "perpendiculares" siguen al gratín por ahora.

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"ERA UN GRAN ALIVIO"

Isidro Moncada (68), jubilado, no cachaba el plan del ministro de Transportes, pero cuando se enteró, pegó el grito en el cielo. Cree que si el sistema fuera bueno, ahí sí correspondería cobrar.

"Esta cuestión me ayudaba harto y era un gran alivio para mi bolsillo de jubilado. Ahora tendré que salir menos, porque no me alcanza".

"NO SERVIRÁ DE NADA"

Apenas se enteró por las noticias del cambio en los contratos del Transchago, Magaly Osorio (44), dueña de casa, agarró calculadora y sacó cuentas negras. Asegura que la eliminación del viaje de vuelta  afectará a un pequeño piño, porque la gran mayoría seguía su viaje a la pega: "Le apuesto que cuando saquen la cuenta no servirá de nada. Con todas las demoras, igual se paga doble".

"NO HAY ECONOMÍA"

"Me parece pésimo. La situación no está para andar derrochando la plata y por lo menos con el sistema actual una estaba tranquila que los trámites se podían hacer con una vuelta. Ya no hay economía con el Transantiago", se largó doña Olga Ulloa (45), dueña de casa, que siempre lleva al doctor a su hijito. Ahora dice que le saldrá salado el transporte y el bolsillo se resentirá.

"OBLIGADO A LA BICI"

Eric Ulloa (23), jornalero, debió buscar una pega más cerca de su casa para llegar temprano. Como vive en Quilicura, perdía los 90 minutos en la espera de  micros. Justo cuando le saltó la liebre, le quitan el beneficio. "La diferencia con las micros amarillas es abismante. Antes con un recorrido  llegábamos a todos lados y pagábamos lo justo. Obligado a andar en bici, nomás".

"FALTA ALZA DE PASAJE"

Chato de irse apretado en el pategoma, Miguel Lobos (52), contratista, decidió tomar las micros clones. Ahora no sabe qué hacer para ahorrarse la plateada de vuelta: "Encuentro súper penca, poco bacán y mala onda que eliminen la gratuidad en la vuelta. Con lo que se demora en pasar la micro. Lo único que falta es que suban el pasaje para que la hagan de oro", espetó enojado.

"ESPERO 90 MINUTOS"

Apenas escucha la palabra "Transantiago", los ojos de Cecilia Martínez (45), dueña de casa, se inyectan en sangre por la rabia: "No me diga na' mijito. Llevo esperando una hora y media esta porquería. ¿Que van a empezar a cobrar los viajes de vuelta? No, ¡No puede ser la canallada!, mejor lo dejo, que viene la micro", mencionó, antes de abordar la oruga que la llevaba a su casa.