Si usted es de los pudorosos que ve todas las cosas blancas o negras, le recomendamos que no lea esta nota. Pero si es de los que cree que las formas de amar entre dos adultos son infinitas, quédese y -en una de esas- puede sacar buenos datos.

El sexo a distancia no sólo tiene mala fama por culpa de algunos próceres de nuestra farándula, a quienes les da por dejar registro de sus momentos de placer, sino también porque pertenecemos a una sociedad que vive estos temas con culpa.

El sexo a través de un teléfono, mensajes o una cámara web, es una realidad que está instaladísima en nuestros días y aunque falten los cojones para reconocerlo, la práctica va en aumento nos explica el director del Centro de Estudios de la Sexualidad, Christian Thomas.

Pero, "¿quién dijo que había sólo una forma de amar?", nos desafía el doc del placer. "Lo primero que hay que entender es que no existe entre los seres humanos una forma natural de sexualidad, ésta se construye en cada momento de la historia", aseguró el especialista.

El desarrollo de los medios de comunicación, las redes sociales y la globalización han cambiado la forma de relacionarse en el ser humano y quien quiera desconocerlo no sabe para dónde va  la micro, explicó el sabiondo.

REAVIVANDO EL CALOR DEL AMOR

Un "te tengo ganas" puede resultar tan excitante como la más sensual de las caricias o el más diminuto de los colaless. Cerrar los ojos y oír como la voz del otro recorre cada centímetro de tu cuerpo, jadea y se detiene donde sabe, puede llegar a ser una experiencia difícil de olvidar.

Si una pareja que ha perdido parte de la pasión que los unió intenta una seducción a distancia, va verbalizar cada una de las sensaciones que tuvieron en sus tiempos. Quizás despejen dudas acerca de lo que el otro siente, "puede ser, incluso, una terapia para reavivar el amor".

El sexólogo aclaró que es evidente que lo ideal es la presencia del otro, pero frente a una pareja que debe estar separada por largos períodos, por ejemplo, es una forma de mantener el calor.

SEDUCTOR EN EL VERSO Y ¿EN LA CAMA?

El galeno nos advirtió eso sí que en el caso que la pareja no se conozca, no al menos en el sentido bíblico, la expectativa que crea un amante virtual seco son altísimas y puede que en la práctica sea más fome que bailar con la hermana.

Otro temita que reconoció es que a través de las redes y medios de comunicación la persona muestra lo que desea que conozcan el otro y esconde verdades que pueden ser fundamentales.

¿Y EL ORGASMO?

Para el doc el orgasmo es un temazo en esta sociedad, pues sea a distancia o en forma presencial "le falta espiritualidad".

Por supuesto es perfectamente posible alcanzar un clímax a través del sexo a distancia, pero ese no es el punto, lo que hay que entender es que  los seres humanos no le hacemos el amor al conjunto de materia que es el cuerpo, se lo hacemos al significado de él.

No da los mismo un buen par de pechugas de Juanita o Estelita, "la que me excita es con quien quiero estar, quien me hace sentir que me desea y a quien le tengo ganas. Esto es independiente si el cuento termina o no en un orgasmo".