Los achicharrantes días del verano ya son historia. Incluso las agradables jornadas de abril empiezan a quedar atrás. Por eso te traemos unos útiles consejos para que puedas prepararte para otro invierno más cargado al frío que a la lluvia.

Sabiendo también que los duros días de pandemia tienen a medio mundo sin ni uno, escarbamos para encontrar tips sencillitos y que no te hagan gastar demasiado.

Aislamiento térmico

Lo primero es buscar todas las rendijas que puedan hacer perder el calor interior de la casa. Sobre todo pon ojo en ventanas y puertas, que por ahí sentir una pequeña corriente fría colarse desde afuera. Burletes o silicona pueden resolver el problema.

Ojo con las ventanas

Si resolviste las filtraciones, también hay que poner ojo con las ventanas porque el vidrio filtra calor. Por eso baja las persianas o cierra las cortinas cada vez que no haya sol.

Ventilación

Como en invierno tendemos a cerrar permanentemente puertas y ventanas, el encierro es el ambiente favorito para un montón de micro bichos. Para cortarles la fiesta los expertos recomiendan ventilar la casa, abriendo las ventanas, al menos unos 15 minutos al día.

Temperatura

Llegamos congelados de la calle, entramos a la casa y la ponemos full. Afuera todos andar con parka, gorro, bufanda y guantes y adentro con polera y a pata pelá. Mala idea pues. Se aconseja que la temperatura del hogar ronde los 20° y por ningún motivo pase de los 25°. A mayor temperatura más gastamos en combustible (el que sea) para mantenerla. Además, los cambios bruscos de temperatura no hacen nada bien para la salud.