Al menos 18 personas perdieron la vida en la masacre perpetrada por Robert Card en Estados Unidos, las autoridades aún trabajan para reconocer a las víctimas.
Los tiroteos ocurridos la noche del pasado miércoles 25 de octubre en Maine, Estados Unidos, dejó al menos 18 personas fallecidas, y 13 resultaron heridas a manos del atacante Robert Card.
Según información publicada por CNN, las autoridades están trabajando en la identificación de las víctimas, pero ya se ha informado sobre las historias de algunas de ellas.
Tricia Asselin, de 53 años, trabajaba medio tiempo en Just-In-Time Recreation en Lewiston, pero en el momento del ataque se encontraba jugando bowling.
“Lo que me dijeron es que cuando todo empezó, ella corrió hacia el mostrador y comenzó a llamar al 911, y fue entonces cuando le dispararon. Esa era ella. No iba a huir. Iba a intentar ayudar”, dijo su hermano al mencionado medio.
La hermana pequeña de ambos logró escapar del tiroteo. Tricia tenía un hijo quien está devastado. “Su hijo fue toda su vida. Desde el día en que nació hasta ayer. Ella hizo todo por él... él era su mundo”, añadió su hermano.
Otra de las víctimas fue Joseph Walker, hijo del concejal de la ciudad de Aubum, Leroy Walker. La autoridad dijo que intentaron obtener respuestas del hospital sobre el paradero de su hijo. Después de 14 horas de espera, fueron notificados de la muerte de Joseph: “Mi hijo era querido por miles de personas”.
“No sólo mataron a mi hermano, sino también a mis amigos”
A la lista de fallecidos se suma Bryan MacFarlane, de 40 años, quien estaba participando en un torneo cornhole en el restaurante Schemengees Bar and Grille cuando fue asesinado, dijo su hermana Keri Brooks a CNN.
El hombre formaba parte de la comunidad sorda local, su hermana se enteró del fallecimiento de MacFarlane en la mañana de este jueves: “Crecí en Maine y la comunidad de sordos es una comunidad muy unida. No sólo mataron a mi hermano, sino también a mis amigos”.
Otra víctima fue Peyton Brewer-Ross, de 39 años, quien estaba jugando en un torneo de cornhole en Schemengees cuando el atacante abrió fuego y murió, dijo su hermano Ralph Brewer, tenía una hija de dos años, Elle.
“Es surrealista y triste. Ahora mi hermano ya no está aquí junto con otras 17 personas. Se fue a jugar al cornhole. Es la persona más agradable que puedas conocer. Nunca tenía nada malo que decir de nadie”, añadió.
Brewer-Ross dijo que su hermano “amaba ser padre más que cualquier otra cosa”, y que la menor “Se despertó diciéndole a su madre, Rachel (Sloat), ‘dónde está papá, dónde está papá. No va a recordar nada de esto, pero al mismo tiempo no va a tener a su padre allí el resto de su vida”.
Otra de las personas fallecidas que estaba en el restaurante fue Arthur Strout, así lo confirmó su papá Arthur Bernard, a WBZ. “Lo más loco es que estuve junto a él justo antes de que ocurriera, minutos, quiero decir 10 minutos antes de que ocurriera”, dijo al mencionado medio.
El hombre agregó: “No me había alejado demasiado en el coche cuando recibí una llamada telefónica diciendo que había un tiroteo allí y yo sabía dónde estaba él en el lugar”.
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