Cuenta la historia que Efraín Plaza Olmedo (1885-1925) era un panadero nacido en una de las familias con el billete más largo del Santiago antiguo, pero que vivía como una especie de anarquista y librepensador.

Una tarde de 1912 agarró un revólver y mató a dos pijes en pleno Paseo Ahumada con Huérfanos. "Tengo la satisfacción de haber vengado a los oprimidos", voceó antes de caer al calabozo.

Por su crimen estuvo 13 años en cana. Fue liberado por gracia de los "Cien días de la República Socialista", pero no alcanzó a estar un mes fuera de la cana. Lo hallaron muerto en "extrañas" circunstancias.

Casi 85 años después, un grupo  utilizó su nombre para adjudicarse el atentado con bomba de ruido en el Hotel Marriott, que dejó al segurito Francisco Monsalves Valdebenito (35) con la pierna derecha herida y la oreja más que roja.

La "Banda Dinamitera Efraín Plaza Olmedo" envió un mail a radio Bío Bío. Aseguró que sus expertas manos fabricaron el explosivo, hecho con un complejo sistema electrónico de detonación automática.

LIBERTAD

El comunicado parte en la dura desde la primera letra: "La tranquilidad del mundo que construyen defensores y administradores de este orden de hambre y esclavitud ha terminado", reza el mail.

La banda aseguró que 15 minutos antes de la detonación llamó a la seguridad hotelera y contó sus explosivos planes. "Si la recepción obedeció órdenes de no perder minutos de trabajo por desalojar el edificio, y envió a los guardias a morir por sus migajas salariales, los dueños del edificio son los únicos responsables", soltaron.