¿Qué tenían en común personajes como Beethoven y Vivaldi con Pedro el Grande? ¿O los presidentes gringos Roosevelt y Kennedy con el Che Guevara? Pues que eran asmáticos.

Aunque no hay estudios concluyentes, se calcula que un 8 a 10% de la población mundial podría estar afectado por esta enfermedad, lo que equivale a 300 millones de personas.

El asma afecta el aparato respiratorio y se caracteriza por el estrechamiento de las vías aéreas por contracción de los músculos y por una inflamación de la mucosa. Estos fenómenos dificultan el paso del aire, provocando tos, ahogos o dificultad respiratoria, sensación de pecho apretado, silbidos al respirar, cansancio y producción de mucosidad espesa.

En Chile, el asma es la enfermedad crónica de más alta prevalencia en la infancia, junto a los trastornos nutricionales por exceso.

Según la doctora Laura Mendoza, jefa de Neumología del Hospital Clínico Universidad de Chile, "hace mucho que las alternativas de tratamiento han hecho del asma una enfermedad que, bajo adecuado manejo, no afecta significativamente la calidad de vida de quienes la tienen".

La piedra angular del tratamiento es la terapia con corticoides administrados en forma inhalatoria para desinflamar los bronquios, además de broncodilatadores en puff u otros de acción prolongada para lograr un mejor control.

Los asmáticos deben entender que, salvo los que presentan síntomas en forma muy ocasional, su enfermedad es una condición crónica que requiere tratamiento permanente. "Es muy importante que aprendan a usar los inhaladores con una correcta técnica, de otra forma la efectividad del tratamiento es muy baja", explica la doctora Mendoza.

Especialistas del Hos-pital Clínico dictarán charlas y talleres gratuitos este martes 4 en el auditorio del Servicio de Oftalmología, como parte de las actividades del Día Mundial del Asma. Más informaciones en www.redclinica.cl.

Todas las respuestas han sido proporcionadas por especialistas del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.