El desesperado rescate de "Monchito", perro símbolo de Chaitén

"Monchito" se llama el primer perrito que fue evacuado de la zona azotada por el volcán. Mezcla de labrador y quiltro, el cachupín fue bautizado por periodistas de Canal 13.
La afortunada historia del cánido en emergencia comenzó el martes, cuando el periodista Ramón Ulloa despachaba in situ la escoba en el desierto Chaitén. El rope se le acercó y, haciéndose el guachito, se cruzó frente a la cámara. Bastó esa salida y la simpatía del animalito para que se ganara el afecto del equipo de prensa, al que siguió a todas partes.
Por esas cosas del periodismo, Ulloa debió salir de la zona y quedó el recuerdo del perrito cariñoso, que se ganó el apócope del apóstol: "Monchito". Además, la gente que vio en pantalla al can mandó ene e-mails a Canal 13 pidiendo desesperadamente su evacuación.
"Y ante la atención de las personas y el cariño, optamos por meterlo como sea ayer (miércoles) en el avión FACH que nos evacuaba a Puerto Montt", contó a la pop el periodista Felipe Vergara, del canal del angelito.
El can llegó a las 15.00 y buscan a sus amos entre los albergados de Castro.
PENA
Día a día aumenta la tristeza en los albergues de Puerto Montt, que cobijan a un gran número de evacuados de la tragedia volcánica en Chaitén.
Los niños son los que más sufren. Preguntan a sus padres por sus perros o gatitos y no saben si aún están con vida o si perecieron por falta de alimento, al ser obligadamente abandonados por sus dueños.
Por este motivo un grupo de caperuzos de la agrupación protectora de animales de Puerto Montt, Albergando un Amigo, miembro de la red de la Coalición por el Control Ético de la Fauna Urbana (CEFU), encabezó la campaña "Nosotros seguimos aquí" y viajó ayer hasta Chaitén para dar asistencia a las criaturas.
Gracias al apoyo de la (FACH), un team de 15 expertos arribó a la capital de Palena a mediodía. Veterinarios de la Universidad Santo Tomás (UST) y voluntarios del grupo animalista reunieron a cachupines y mininos en el gimnasio de Chaitén, evaluaron su estado de salud y les brindaron atención primaria. La buena noticia es que no encontraron a ningún regalón tan enfermo. "Sólo están desesperados por falta de alimento", contó un doc.
"Albergando a un Amigo" viajó con 1.500 kilos de comida para mascotas y algunos medicamentos donados por la UST. "Ésta es la primera fase de un trabajo que esperamos prolongar. Queremos traer a 100 perros que ya han sido solicitados por sus dueños", dijo a La Cuarta la dire de CEFU, Alejandra Cassino.
El grupo regresó a Puerto Montt la tarde de ayer con 15 animales: 8 fueron devueltos a sus amos y el resto -gatitos y cachorros- pueden ser adoptados.
Hoy un lote integrado por Pablo Peñaloza, de CEFU, voluntarios y un veterinario viajarán desde Coyhaique hasta Futaleufú. Van cargaditos con mil kilos de comida para los coludos.
La cruzada también pretende embarcar al resto de las mascotas que aún no son reclamadas por sus dueños e iniciar una campaña de adopción.
Ellos también tienen derecho a seguir viviendo.
Ronald Henríquez M.
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