El 20 de diciembre de 2008, Jorge Carinao participaba en el Centro de Entrenamiento Olímpico (CEO) en una competencia de halterofilia, su pasión desde las 14 años.

"Hice dos intentos nulos por levantar 110 kilos. Al tercero la barra se me fue sobre los hombros y cuando mi trasero golpeó con el suelo, la barra hizo palanca", cuenta el deportista que quedó parapléjico a los 17 años.

"En la clínica nadie me quería decir por qué no sentía mis piernas. Me daba lata que me vieran porque no podía caminar", recuerda el pesista que ya se proyectaba como una de las promesas del levantamiento de pesas en Chile, pues ya tenía en su vitrina un segundo lugar en unos juegos Panamericanos.

"No sentía pena, sentía melancolía cuando analizaba mi situación. Ver a los otros pesistas me daba mucha melancolía, pero tuve que asumir", cuenta Jorge, de 20 años.

ESFUERZO

Pero el joven deportista jamás se echó a morir. Tras ardua rehabilitación en el Hospital del Trabajador, decidió volver a lo suyo.

Y ya es crack en alzar la barra. En los últimos Parapanamericanos, en Gudalajara, Carinao levantó un total ponderado de 133 kilos, tras sortear con éxito los dos primeros intentos (112 y 117 kilos) y fallar en el tercero (121).

Esos 117 kilos le valieron al deportista imponerse con un nuevo récord a nivel panamericano, lo que lo clasificó a los paraolímpicos de Londres 2012, para los que ya está entrenando. ¡Se pasó!

"Estoy feliz de haber clasificado. Siento que me he reencantado con las pesas. Es bonito volver a competir. Da alegría sentir los nervios, la ansiedad, echaba de menos eso", realata Jorge, que desde su primera competencia para discapacitados ve todo con otros ojos.

"Cuando tú ves a tantas personas que están discapacitadas, te dices a ti mismo: 'yo no estoy tan mal'", reflexiona.

Carinao cuenta que lo que le sucedió fue una prueba de Dios para sobreponerse a su destino. "Probablemente si hubiese seguido compitiendo de forma normal, nunca hubiese conseguido tantos logros como ahora."

- ¿Y le gustaría participar de la Teletón?

- La verdad es que todavía no me han invitado, pero si me invitan, no tengo problemas en participar. Encuentro que la obra que ellos hacen es maravillosa.