Sentimientos encontrados vivió ayer Patricia Rocha, una de las dos hijas que sería fruto de una relación extramarital de Luis Esteban Rocha Matamala (75), padre del fundador de la Universidad Santo Tomás, Gerardo.

La repentina partida del progenitor del empresario educacional y, por otro lado, situaciones "pendientes" con su padre la hicieron meditar profundamente. Era el dolor de la hija que nunca fue aceptada en la familia.

Ella y su hermana, que no asistió al sepelio, aseguran guardar tristes recuerdos del difunto.

Patricia asegura que nació de una relación entre Luis Esteban y su prima Patricia Matamala. El parentesco legal lo corrobora un certificado de nacimiento en su poder.

"Necesitaba encontrarme con él, pero no en esta situación. De hecho, nos íbamos a juntar el 5 de diciembre a conversar. Yo necesitaba que me dijera: Hija, perdóname", señaló Patricia.

PELEA

Para que nadie de la familia la reconociera, Patricia esperó que el cortejo enfilara por una de las calles del Cementerio Metropolitano y se ubicó detrás.

Llevaba gafas oscuras y vestía polera negra y pantalón lila.

En sus brazos portaba un ramo de claveles rojos como mudo testigo de aquellos sentimientos complejos de abordar.

"Era una persona tan irónica, pero estaba dispuesta a perdonarlo. Ahora que falleció no sé si valdrá la pena pelear por algo", agregó.

Patricia tampoco tenía mucho contacto con su medio hermano y fundador de la Universidad Santo Tomás, Gerardo Rocha.

"Yo a Gerardo Rocha lo habré visto un par de veces. Nada más. Ni siquiera para un funeral", remachó.

Luis Esteban Rocha fue sepultado al mediodía de ayer en un nicho de la calle C-10, un sector donde descansan los restos de suboficiales de la Fuerza Aérea de Chile.

La semana pasada fue internado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de la Fach, donde se le practicó una revascularización miocárdica tras sufrir un paro cardiaco. El miércoles pasado su cuerpo no resistió más.

Jaime Salas T.