El doble, el triple, la fotocopia, clon o timbre de agua del millonario Leonardo Farkas se pasea también en una fastuosa Hummer por Viña y La Serena, pero en vez de tirar monedas a la chuña, arroja chocolates. Obvio, si es el doble, nomás.

Tomás Silva (26) no tiene nada que ver con "Ricitos de Oro". Es más joven, no usa melena ni dispone de la cuenta corriente del empresario farandulín. Pero la gente lo confunde igual con el súper millonario en las calles de la Ciudad Jardín, cuando promociona una marca de chocolates.

Asomado por la ventana de la limusina, el Farkas de quinta de recreo arroja golosinas y billetes de Monópolis, más arrugados que un papel crepé,  a la desatada concurrencia, que corre al lado del suntuoso auto como si le fuese a cambiar la vida.

"Las reacciones de la gente son locas. Se tiran encima para que les regales un dulce, te gritan cosas, pero en general siempre son buena onda y mi vestimenta llama mucho la atención", verseó.

Pero eso es lo único que hay en común con el hombre orquesta. "Los billetes que yo tiro en realidad son volantes que invitan a participar en la página www.encuentraeltuyo.cl y así poder ganar un paseo en la Hummer" , dice.

Tomás se pasea peluca al viento por las calles de los topísimo balnearios y discotecas playeras, acompañado de dos modelocas. Saluda al estilo Farkas, pero chantea completamente a la hora de entregar una propina. "De repente le entrego a la gente billetes falsos mientras ando vestido de Farkas. Primero lo miran y luego, cuando se dan cuenta que es de mentira, se ríen", comenta.

- Tsss... Yo te aforarría por jugar con mis sentimientos.

- Es una humorada, nomás.

- Chistosito. Y si tuvieras las lucas de Farkas, ¿llevarías el mismo estilo capilar chocopandero y el pañuelo de seda?

- Pero claro, lo encuentro total. Es un tipo totalmente original. Sería 100% como él, desde el pelo hasta los relojes millonarios.

Mañana Tomacho parte a Viña del Mar a jugar al ricachón. "Sé que Leonardo anda allá por el Festival, así que ojalá me lo tope por algún lado dando vueltas",  dice.

¡Las patitas!

Daniela Herrera M.