No sólo en Chile hay gente que lo pasa mal por las movidas de Rafael Garay.

Al otro lado del mundo, específicamente en Japón, vive un hombre que asegura haber sufrido por culpa del ingeniero comercial.

El japo se llama Mitsuaki Neichi (51), reside en Yokohama y vivió, según él, un feliz matrimonio junto a María Runcan, la pareja rumana que por estos días acompaña a Garay en su arresto domiciliario, en Brasov.

En conversación con La Cuarta, la samurái, el hijo del Sol Naciente quedó con los ojos cuadrados cuando se enteró de los pasos en que andaba la rubia, quien fue el amor de su vida.

"En el último tiempo, nuestros valores cambiaron. Por ese motivo, el 27 de octubre de este año nos divorciamos", sapeó con la catana adentro.

El hombre jura de ombligo que no le guarda rencor a la nueva novia del autodenominado economista, aunque cambió sus estado en Face de casado a divorciado.

Cabe recordar que radio ADN subió una foto en la que el pelado figuraba en París con la rubia rumana, pasándolo chancho en julio de este año.

Eso sí, tiene claro que el pelado le ganó el quien vive, probablemente, durante las veces en que Garay viajó a Japón a practicar Kudo.

No conoció a Garay

"A Garay no lo conocí personalmente, pero supe que María inició una relación con otra persona", dijo.Mitsuaki Neichi aseguró que desde diciembre del 2015 no vivían juntos y aclaró que ya está repuesto por el fin del matrimonio y que lo sobrellevó bien gracias al apoyo de sus taitas.

"Durante julio y agosto me fui a la casa de mis padres a vivir el duelo", dijo. Y sus amigotes, en Yokohama, también lo ayudaron a mantener la frente en alto.

Matrimonio

Según el oriental, él y María Runcan hicieron los primeros cambios de luces hace doce años, en Japón.

Él era un asiduo cliente a locales nocturnos. "¿Es necesario entrar en detalles sobre cómo nos conocimos", dijo Mitsuaki, quien aseguró haberse casado con María el 2009.

"Durante nuestros años de matrimonio, fuimos felices, como una familia cualquiera. Eso sí, no tuvimos hijos", advirtió.

- ¿Qué opinión tiene de María Runcan?

- Ninguna.

- Pero hicieron cucharita durante nueve años...

- Sólo puedo decir que hay una foto que salió en la prensa chilena, de una cámara de seguridad. Esa mujer que aparece con el tipo, no es María.

- ¿Cree que Garay podría casarse con ella?

- Por eso nos divorciamos. Él es un tipo deshonesto y sin honor.