Los ex carabineros Víctor Rivas y Armando Salgado fueron expulsados de Carabineros en mayo de 2007, según ellos, por ser homosexuales. "Fuimos humillados, amenazados y víctimas de burlas", recordaron los ex uniformados que ya llevan tres años de pololeo.

Pese a los basureos que sufrieron, Víctor y Armando siguen llevando en el corazón a la institución de las carabinas cruzadas y ayer presentaron un recurso en la Corte de Apelaciones de la capital para revertir las bajas y ser reintegrados a la policía uniformada.

Tras ser exonerados, Víctor se puso a estudiar Enfermería y Armando encontró trabajo como guardia de seguridad. "Pero siempre están las ganas de volver a ser carabinero. Y no me da miedo porque es mi vocación y la llevo en la sangre. Si yo hubiese seguido en la 11a Comisaría de Lo Espejo a fines de este año habría ascendido a cabo segundo", dijo el ex carabinero Rivas.

Su pololo fue echado de la 40a Comisaría de Fuerzas Especiales y también quiere volver a Carabineros. "Fui perseguido y hostigado, pero igual me gustaría reintegrarme a la institución. No veo el problema entre ser homosexual y servidor público", señaló Armando Salgado.

En la demanda al Estado, los ex uniformados también exigen el pago de 100 millones de pesos, 50 por nuca.

"Las persecuciones a homosexuales en las Fuerzas Armadas siguen ocurriendo. En conversaciones que he tenido con funcionarios activos de las distintas ramas he sabido que los siguen apuntando con el dedo y hostigando hasta echarlos. Lamentablemente es una cultura homofóbica que aún no desaparece", dijo el capo del Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez.