Este domingo llegó a Chile el exarzobispo de La Serena, Francisco José Cox, para enfrentar acusaciones de abuso sexual que pesan en su contra, los que habrían sido cometidos mientras ejercía el sacerdocio.

El regreso del religioso de 85 años se da luego de la orden del movimiento de Schoentatt que decidió su retorno, tras vivir 17 años en Alemania.

La información fue confirmada mediante un comunicado del Instituto Secular de los Padres de Schoenstatt, en el que se señala que "tras la realización de los exámenes médicos pertinentes, se ha podido concretar el traslado del ex obispo Francisco José Cox a Chile, con el fin de que enfrente los procesos que la Justicia requiera", reafirmando el compromiso de la Congregación con la justicia.

En tanto que uno de los primeros denunciantes del exobispo, Hernán Godoy, expresó a Radio Cooperativa que "estaría bueno que la justicia ponga su mano dura y que llegue hasta las últimas instancias. Yo me conformo que en esta lucha a Cox se le condene y justamente con eso me quedo tranquilo, eso sería lo que yo estoy buscando".

Asimismo, Godoy dijo tener un "montón de sentimientos encontrados porque, a fin de cuentas, en el algún momento la Justicia decidirá que yo tengo que enfrentar a Cox. Volver a verlo después de tantos años, igual, aunque uno se ponga una coraza de guerrero,intimida un poco el asunto. Pero acá estoy, estoy firme".

Desde su llegada, Francisco José Cox se encuentra bajo los cuidados de un matrimonio en una casa particular a las afueras de Santiago.