Gracias a las manos del doctor Pedro Vidal las gitanas Mania Díaz y Cristal Aréstidas quedaron más lindas que el sol.

Desde su tierna infancia, las dos primas soportaron estoicamente las bromas de la gente que se burlaba porque tenían la nariz algo apartadas del patrón típico de la estética.

A pesar de lo contreras que se pusieron sus amigos gitanos, Mania y Cristal se armaron de valor y se sometieron a cirugía con el doctor Vidal, mostrándose ante todo Chile con una pachorra que sólo tiene el pueblo gitano.

Ahora ambas pueden salir felices a la calle para seguir leyendo las manos de los gayó en el Parque Forestal, con un rostro nuevo y hermoso.

Gracias a que se atrevieron a cambiar, soplaron por ahí que en vez de burlas, ahora sus amigos las llenan de piropos.