En prisión preventiva quedaron dos ex carabineros que se aprovecharon de los servicios de una red de corrupción para limpiar la sangre de una alcoholemia.

Se trata del paqueli Ricardo Paulaza Rubilar y de Luis Muñoz Chamorro, quien se desempeñaba como guardia de Palacio en La Moneda.

No contentos con la cochinada, los funcionarios clavaron a la misma vieja que los ayudó con 800 lucas de la movida.

CHOQUE

La noche del martes 3 de junio de 2008 Paulaza se fue de carrete bien regado con vodka, chicha y amigotes.

De regreso a su casa y ya con la sopaipilla totalmente pasada, se saltó un rojo del semáforo, chocó y huyó del lugar.

No llegó muy lejos. Los sagaces funcionarios de la 4a Comisaría siguieron el terrible tufo que deja esta mezcla, conocida como "Zar-Chilote", y lo atraparon.

Antes de subir al furgón, el pipa rompió su Tarjeta de Identificación Policial, para que no lo cacharan sus colegas. Fue en vano, porque lo rocharon y lo enviaron al hospital institucional, donde le hicieron la alcoholemia.

Cuando pasó la caña, le pidió consejos a su amigo Luis Muñoz Chamorro, ex compañero en la 52a Comisaría de Maipú y coterráneo de la VIII Región. "Yo conozco a alguien que puede ayudar", dijo el verde.

Muñoz Chamorro fue quien al día siguiente movió los hilos para solucionar el asunto. Se contactó con Margarita Cuadros, jefa de una red de corrupción que tuvo entre sus clientes al ex prefecto de la PDI Trevor Oyarzún y que entre sus poderes tenía el dejar más blancas que un narciso las alcoholemias.

Días después los dos carabineros se juntaron con la "Tía Maggy" para pagarle la primera cuota por el trabajo: 200 lucas.

ESTACIONAMIENTO

Al otro día, durante una nueva cita, Paulaza alargó el brazo en un estacionamiento del Cementerio General y la "Tía Maggy", provista de tubos de muestras con el logo del SML, le extrajo sangre fresca para reemplazar los glóbulos rojos manchados con borra de chicha y vodka de la muestra original y que motivó a que le cursaran la baja.

Días después llegó un informe al juzgado, el que mostraba 0,00 gramo de alcohol en la sangre. El milagro estaba hechito. Paulaza, vivo como él solo, pasó 500 lucas más y prometió pagar el resto en cómodas cuotas. "Acuérdese que me debe", dijo la "Tía Maggy". Pero no pagó.

No obstrante, en febrero pasado Paulaza logró el reintegro a la institución. Pero pocazo le duró la vida de uniforme, ya que junto a su cumpa Muñoz  se ganaron la PLR y quedaron en prisión preventiva.

GENERAL GORDON LES HIZO LA CRUZ

Como "conductas individuales, no de la institución", calificó el general director de Carabineros, Eduardo Gordon, la caída de dos funcionarios que aparecen vinculados a la red de corrupción que lideraba Margarita Cuadros Aedo y que es indagada por la Fiscalía Centro Norte.

El general afirmó que "nosotros en el día de ayer, sobre la base de los sistemas de control interno, confirmamos que un carabinero había sido beneficiado de esta red ilegal".

Y en concordancia con lo anterior, la institución policial informó que por faltas a la ética se dio de baja a otros dos funcionarios que sabían de la red que adulteraba alcoholemias, pero no informaron de ello.

C. Sanz/ M. Vega