De la peor forma culminó en la mañana de ayer la incesante búsqueda de Slavko Yaksic, el chileno de 29 años que se encontraba desaparecido desde el 25 de septiembre en Sudáfrica.

Su padre, Sergio, ayer informó que lo encontraron sin vida y con signos de haber sido asaltado y asesinado. "Hoy (ayer) 20 de octubre a las 9:30 am hrs. de Sudáfrica, (4:30 am. hora de Chile), encontré el cuerpo sin vida de mi hijo Slavko Andro Yaksic Besoain. (Q.E.P.D), en la morgue de la localidad de Ladysmith, Sudáfrica", escribió en Facebook.

Agregó que un transeúnte lo halló el 13 de octubre y dio aviso a la policía. Conforme a los peritajes, tenía una data de muerte del 28 de septiembre.

El cuerpo presentaba signos de haber sido agredido. "Tenía dos heridas cortopunzantes en el plexosolar", dijo el padre.

"Se encontraron su identificación, sus tarjetas de crédito y pertenencias que demuestran que estaba acampando. Fueron robados su mochila, celular y pasaporte. No existe ninguna duda que el cuerpo encontrado corresponde a Slavko", explicó.

Sergio Yaksic pedirá este lunes la devolución del cuerpo, para posteriormente cremarlo para retornar a Johannesburgo y realizar la inscripción del fallecimiento en el Consulado de Chile en Pretoria.

Responsable

"Kako" era oriundo de Osorno y se había comunicado con su familia por última vez el 25 de septiembre pasado, a través de Whatsapp y, según la información que maneja la familia, había sido visto por última vez en la localidad de Dundee en una comunidad cristiana.

El joven planeaba visitar a amigos sudafricanos el 7 de octubre, antes de volar a Chile para acudir a la boda de un amigo y participar en un programa de bomberos voluntarios.

Las alarmas saltaron el pasado día 10, cuando no tomó el avión que debía llevarlo de vuelta a casa.

Al ingeniero informático de profesión, su padre lo describió como un "chico muy responsable" que sacó notas excelentes en la escuela y que, tras completar su formación, decidió vivir de forma alternativa viajando por el mundo y trabajando a distancia.

"Le he pedido a mi familia y amigos que aceptemos este trágico evento como un momento de vida. La vida no son sólo momentos dulces, sino son distintas emociones que nos hacen dar cuenta de muchas cosas", reflexionó.