Ocho de la matina con 30 minutos en punto. La ministra en visita del caso de Jorge Matute, Carola Rivas, llegaba a la Corte de Apelaciones de Concepción. Tres horas más tarde se juntaba con los apóstoles de la prensa, quienes quedaron de una pieza al escuchar la bombita que destapó la alta magistrada.

Tras un año y medio de total hermetismo, la jueza soltó que nuevos peritajes del Servicio Médico Legal pillaron un segundo fármaco en los restos del joven desparecido en noviembre de 1999, en la ex disco La Cucaracha, de Talcahuano, y cuyos restos se hallaron en febrero de 2004, a orillas del río Biobío.

Si bien no largó el nombre del nuevo químico y menos los efectos que éste pudo haber producido, sí reveló que hay 18 personas bajo de la lupa por esto. Por el momento, cinco de estos sujetos han sido entrevistados por los sabuesos de la PDI que indagan el entuerto.

“El nombre de la droga no la puedo señalar, pero son nuevos componentes, también de orden farmacológico, que nos permiten identificar con mayor precisión la naturaleza del fármaco”, dijo la jueza, quien desde fines de julio de 2014 está a cargo de sustanciar la causa de desaparición y muerte del joven estudiante de ingeniería forestal de la Universidad de Concepción.

Equipos

A principios de 2015 cuando se supo de la presencia de pentobarbital en las osamentas de “Coke”, un fármaco de uso netamente intrahospitalario.

Con este nuevo hallazgo “se confirma que la carga de pentobarbital es suficiente para provocar la muerte”, dijo la ministra en visita, quien cuenta con un equipo de 3 efectivos de la PDI de Santiago que ahora están con dedicación exclusiva en las pericias del Caso Matute.

Por su litro, el inspector Diego Novoa de la Brigada de Homicidios Metropolitana, explicó que “estamos haciendo diligencias dirigidas a ubicar, entrevistar personas, en conjunto con la ministra (Carola Rivas), y también en perfeccionarnos cada vez más en el fármaco pentobarbital”.

El sabueso también largó que de los 18 nombres barajados a propósito del nuevo fármaco, algunos de ellos se encuentran fuera de Chilito.

“El grupo de 18 personas podría ser más amplio. Hemos tenido contacto con varios de ellos, faltan muchos más, al igual que personas que asistieron esa noche a la discoteque”, remachó”.