No distingue rubios, morenos, flacos ni pelados... En Maipú llevan años con la llave cortá. La presión del agua es tan miserable, ¡que no alcanza ni pa' encender el calefón!

Jaime Echeverría, su esposa y dos hijas viven en la Ciudad Satélite 2, donde el sueño de la casa propia se transforma en pesadilla cada vez que intentan ducharse, lavar la ropa e incluso tomarse una taza de té.

"Llevamos cinco años así, desde que entregaron las casas. ¡Ni siquiera se prende el calefón!", se quejó.

Por si fuera poco, a ese atado se agrega la gran cantidad de sarro que tapa las cañerías y obliga a los vecinos a limpiar continuamente los grifos y hasta los hervidores.

"El agua sale turbia, no se puede beber", reconoce Jaime, dueño del local de sanguches gigantes Pollo Cabrón, donde a veces la falta de agua no deja ni lavar los platos.

El drama de Jaime no es el único. Miriam Giesen recibió su soñado hogar en el mismo sector hace cinco años, pero en vez de ser feliz como una lombriz, "nuestra vida gira en torno a la llave", asegura.

Giesen se queja porque, pese a tener dos duchas súper cachilupis, no puede usarlas al mismo tiempo. Con harta suerte la presión del grifo alcanza para remojarse con agua tibia en uno de los baños.

"Si no te bañas entre las 7.30 y las 8.30, sonaste hasta las 11 de la noche", explica Miriam.

Pero el drama es aún peor. "Hay cero presión de agua, así que el calefón ¡ni siquiera alcanza a encender!", alega la maipucina.

FALTA UNA COPA

El problema de estos dos vecinos es el mismo que sufren 20 mil familias de diversos sectores de Maipú. El concejal Cristian Vittori reveló que hace más de seis años se debió haber construido una nueva copa de agua, pero todavía no pasa nada.

"La semana pasada el agua se cortó completamente, el problema fue tan grave que hasta tuvieron que suspender las clases en un colegio cercano", dijo a La Cuarta la autoridad comunal.

El concejal y los vecinos coinciden en que el origen del embrollo es que las casas se multiplicaron como los gremlins en los últimos años, pero la red sanitaria quedó donde mismo.

SOLUCIÓN

En la empresa sanitaria de Maipú (Smapa), reconocieron el drama de los vecinos y aseguraron que ya se pusieron las pilas pa dar la llave.

"La próxima semana presentamos el proyecto y esperamos iniciar la construcción de un nuevo estanque el primer trimestre del 2012", afirmó Rodrigo Alvarado, dire de Smapa.

Si todo marcha bien, en octubre del próximo los dramas con el vital elemento serán cosa del pasado para los maipucinos. También tienen planeado compensar a los afectados.