Si aún estuvieran en el colegio los diputados de nuestro terruño, mínimo se habrían ido de anotación, un rojo y una citación del apoderado. Es que ni el más osado de los estudiantes cimarreros se manda dos inasistencias al hilo si ya le hicieron la pillá.

En la Cámara todavía no se ponían de acuerdo en las sanciones para aplicar a los honorables que no llegaron a la sesión del lunes, y que debió posponerse por falta de quórum, cuando este jueves se lucieron con la misma cantinela.

Esta vez los diputados tenían como misión llegar a las 10.30 horas de la madrugada para discutir el proyecto que sanciona los estereotipos negativos contra la mujer en la publicidad, pero como si estuviéramos en el día de la marmota la sesión se tuvo que suspender, otra vez, porque pese a que había un lote más grande, se desaparecieron de a poco.

Fue el diputado del Partido por la Democracia, Cristián Campos, el que paró el escándalo y pidió a su par, Marcos Espinosa del PRSD, que suspendiera la sesión por un tiempo delimitado para esperar a los parlamentarios, pues en la sala sólo habían 34 de los 118 puestos habilitados (recordemos que hay dos honorables desaforados).

De inmediato surgieron las reacciones entre los parlamentarios y tal como sucedió a principio de semana el presidente de la Cámara, Osvaldo Andrade, volvió a alzar la voz, pero esta vez anduvo prestando ropa a sus colegas.

"Se trabajará intensamente en mejorar las medidas para fiscalizar el trabajo legislativo, aunque esta vez cometimos un error, porque existían dos comisiones que estaban autorizadas para trabajar de manera paralela, las que no fueron incluidas y así habríamos superado el quórum de 39 diputados", dijo.

Más tarde, trascendió que sólo la comisión de Deportes estaba sesionando con ocho de sus 13 integrantes, a la hora que se trabajaba en la Sala.

Finalmente se pudo retomar la conversa cuando estos parlamentarios se reincorporaron a la discusión de la sala y lograron sumar 42.

REACCIONES

La PC Karol Cariola es una de las diputadas mejor "comportada" en el cuento de la asistencia y tomó la palabra a raíz de la polémica que han generado los legisladores buenos para hacer la chancha.

Dijo que hay que buscar las medidas para asegurar la presencia de los diputados en la sala, pero se debe tener en cuenta que muchas veces los mismos parlamentarios sesionan en otras comisiones paralelas, "hay que tomar medidas, porque o simplemente se suspenden las comisiones paralelas o se piensa ya en bajar el quórum, porque ambas cosas no se pueden hacer", señaló.

A propósito de las sanciones, tras el incidente del martes se determinó que los 63 congresistas que faltaron a la sesión deberán pagar una multa de 90 mil pesos, equivalente al 1% de la dieta en bruto, por lo que no se descarta una nueva sanción quienes por segunda vez no se hicieron presentes en la sala.